Las lluvias excepcionales que acontecieron en Malí, desde junio a septiembre del año pasado, provocaron cerca de 400 muertos, más de 400 heridos, un cifra cercana a un 1,5 millones de personas sin hogar y las pérdidas de 158.000 casas y 31.000 cabezas de ganado.
Se habla de lluvias excepcionales ya que sobrepasaron más del 200 % la pluviosidad de la temporada, afectando incluso a las zonas desérticas septentrionales.
Fuente: Africa Radio
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