El gobierno de Zimbabue comenzará la próxima semana a llevar a cabo una auditoría de sus trabajadores para establecer una plantilla creíble, después de las críticas sobre que miles de personas, que no son empleados del estado, están recibiendo un salario.
Los críticos han acusado al partido del presidente Mugabe, el Zanu PF, de haber “metido de extranjis” a seguidores del partido en la plantilla del gobierno, especialmente a jóvenes del programa de formación nacional, acusado de desencadenar la violencia electoral contra la oposición.
El ministro de Servicios Públicos, Eliphas Mukonoweshuro, declaró el día 18 que la revisión tendría lugar entre el 23 de noviembre y el 18 de diciembre, pero no incluirá a los miembros de las fuerzas de seguridad.
Un informe del auditor general del país, publicado el mes pasado, mostraba que el ministerio de Empoderamiento de la Juventud, que administra el controvertido programa de formación para la Juventud, tenía más de 10.000 personas en su nómina, que no estaban empleadas por el gobierno.
“La idea es que el gobierno pueda responder de la integridad de la plantilla, revisando el personal que tiene y eliminando las irregularidades, si es que las hubiera”, señaló Mukonoweshuro.
“Esta auditoría no es en ninguna manera una caza de brujas, si se encuentran errores, queremos, como gobierno dar la cara y tener el coraje de enfrentarnos a esos errores”, añadió.
Los cuatro millones de dólares que costará la auditoría provendrán de fondos del Banco Mundial.
Zimbabue está sometido a fuertes presiones para que emprenda amplias reformas políticas y económicas, después de la formación del gobierno de unidad en febrero, pero la nueva administración todavía no ha podido atraer fondos de los recelosos donantes occidentales.
Mukonoweshuro aseguró que más de 200.000 personas están empleadas por el gobierno, la mayoría de ellos profesores, añadiendo que la auditoría además establecerá la amplitud de la pérdida de personal con formación de calidad, la llamada fuga de cerebros, después de que miles de zimbabuenses abandonasen el país en busca de un salario mejor por su trabajo.
(News24, 18-11-09)
