Las Asociaciones de Derechos Humanos de Zimbabue han elogiado la decisión de su gobierno de ratificar la Convención contra la tortura de las Naciones Unidas.
Los activistas describen la medida como un primer paso positivo para el país del África austral, cuya historia reciente está plagada de acusaciones de impunidad entre las fuerzas de seguridad.
En un mensaje para celebrar el día internacional de la ONU en apoyo de las víctimas de la tortura, las asociaciones agrupadas bajo la ZimRights dicen que se sienten animados por la decisión tomada por su gobierno de ratificar la convención contra la tortura de la ONU, y criminalizar toda clase de trato degradante e inhumano. Hace mucho tiempo que deberían haber tomado esta decisión, declaran los activistas por los derechos humanos.
El ministro de Justicia, Patrick Chinamasa anunció la semana pasada, durante la 19 sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, que Zimbabue finalmente había ratificado la convención contra la tortura, terminando así con años de resistencia por parte de las autoridades de Harare.
Los grupos de defensa de los derechos humanos de Zimbabue también aplaudieron la decisión del gabinete de ministros de adoptar un código de conducta que rija las operaciones del órgano de Sanación y Reconciliación Nacional.
Este órgano es una creación del acuerdo de reparto de poder de Zimbaube, firmado por el presidene Robert Mugabe, y los antiguos líderes de la oposición, Morgan Tsvangirai y Arthur Mutambara, en 2008.
Su función es crear las condiciones para una coexistencia pacífica entre los zimbabuenses después de los violentos enfrentamientos que se produjeron durante las disputadas elecciones de 2008.
El grupo ZimRights dice que el código de conducta “ayudará a garantizar que se haga responsables a los partidos políticos de la conducta violenta de sus seguidores.
El día internacional de apoyo a las víctimas de la tortura se celebra cada año el 26 de junio.
(African Press Agency, 26-06-12)
