Un asesor del nuevo presidente Adama Barrow, reveló el domingo 22 de enero , en una conferencia de prensa que el país está en crisis financiera debido a la acción del ex presidente.
«Las arcas están vacías, en cuestión de dos semanas, 500 millones de Dalasi (más de 10 millones de dólares) han sido retirados por el ex presidente, confirmado por técnicos del Ministerio de Finanzas y el Banco Central de Gambia», dijo Mai Ahmad Fatty y añadió que se está llevando a cabo una evaluación para determinar las pérdidas reales.
Yahya Jammeh, quien había gobernado Gambia durante 22 años, se exilió fuera del país el sábado con más de una docena de coches de lujo y otros artículos.
Jammeh, que se instalará en Guinea Ecuatorial, acordó dimitir después de más de un mes de mediación, negociaciones y una intervención militar de los líderes africanos, el bloque de la CEDEAO y las Naciones Unidas entre otras personalidades políticas de primera orden.
Perdió las elecciones del 1 de diciembre y dejó su cargo por sólo un corto período después de lo cual retrocedió para acusar a la comisión electoral de irregularidades en los votantes y pidió una repetición.
Como parte del acuerdo de 14 cláusulas alcanzado el sábado 21 de enero para su renuncia, la CEDEAO, la UA y la ONU aseguraron a Yahya Jammeh, su familia y ayudantes, seguridad y derechos.
Además, los organismos internacionales «impedirán la incautación de bienes y propiedades que pertenezcan legalmente al ex presidente Jammeh o a su familia y los de sus miembros del gabinete, funcionarios gubernamentales y partidarios del Partido, garantizado por la Constitución y otras leyes de Gambia».
«La CEDEAO, la UA y la ONU trabajarán con el Gobierno de Gambia para garantizar que el ex presidente Jammeh tenga libertad para regresar a Gambia en cualquier momento a su elección, con conformidad a la legislación internacional sobre derechos humanos y sus derechos como ciudadano de Gambia y ex jefe de Estado».
Africa News
(Traducción y edición: Marta de la Mata)
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