Una corresponsal de la agencia internacional Bloomberg, declaró el día 22 de junio que había sido detenida por agentes de seguridad del estado en Sudán, durante cinco horas, mientras intentaba cubrir una protesta estudiantil.
Salma El Wardany, una egipcia, fue detenida el día 21 de junio, un día después de que el corresponsal de la AFP, Simon Martelli, un británico, fuera puesto en libertad después de más de 12 horas bajo custodia sin cargos.
Ambas fueron detenidas por oficiales de inteligencia en la universidad de Jartum, donde la policía antidisturbios dispersó violentamente una serie de protestas, que se producen desde el pasado día 16 de junio.
Las manifestaciones diarias se producen para protestar contra los altos precios de los alimentos y para pedir un cambio de régimen, y ahora se han extendido a otras partes de la capital de Sudán, Jartum.
Wardani dijo que ella y otra periodista sudanesa estaban aparcando a medio día, a la puerta del campus de la universidad en el centro de la ciudad, cuando “seis hombres grandes” se aproximaron, gritando y golpeando su coche.
“¿Qué están haciendo? ¿Están tomando fotos?” preguntaron, según la periodista, antes de incautar sus ordenadores y llevarlas a las afueras de la ciudad para interrogarlas.
Sin cargos
Los hombres no se identificaron, según la periodista, añadiendo que los testigos vieron lo que pasó e informaron de ello en la red social twitter, lo que provocó una enorme campaña “por su liberación”.
La egipcia explicó que ha sido puesta en libertad sin cargos y que no tuvo acceso a un teléfono ni a un abogado mientras estuvo detenida. Su colega sudanesa también fue puesta en libertad.
Los agentes de seguridad la han prohibido trabajar como periodista, a menos que el consejo de Prensa del país, decida lo contrario.
Las fuerzas de seguridad de Sudán han puesto en práctica una política de tolerancia cero con los disidentes en los últimos días.
Problemas financieros
Parece que el ejército es particularmente sensible a las manifestaciones en el entorno de la universidad de Jartum, donde las protestas en 1964 finalmente provocaron un levantamiento masivo que derrocó a la dictadura militar que estaba entonces en el poder, en lo que pasó a conocerse como la Revolución de Octubre.
La inflación ha aumentado mes tras mes, alcanzando el 30.4 % en mayo, y se espera que los precios aumenten más aún, después de que el ministro de Finanzas, Mahmud al-Rasul, anunciase el miércoles día 20, medidas de austeridad como la retirada de los subsidios al combustible.
Sudán ha perdido millones de dólares en ingresos por el petróleo desde que Sudán del Sur obtuviera la independencia el pasado mes de julio, dejando a Sudán asolado por la inflación, la falta de los dólares que necesita para pagar las importaciones y una moneda cuyo valor se hundió.
Los defensores de la libertad de prensa han criticado la represión de las voces críticas intensificada en las últimas semanas, incluida la confiscación de algunos periódicos, después de haberse imprimido.
(News 24, 22-06-12)