El aeropuerto internacional Jomo Kenyatta de Nairobi quedó completamente paralizado la mañana del miércoles por una huelga sorpresa de sus trabajadores, lo que provocó que cientos de pasajeros vieran cancelados sus vuelos.
La huelga fue impulsada por los miembros del Sindicato de Trabajadores de la Aviación Keniana (KAWU, según siglas en inglés), que protestan contra un proyecto de adquisición del aeropuerto por la sociedad nacional Kenya Airways. Los trabajadores temen que la fusión propuesta entre la Autoridad de Aeropuertos de Kenia y Kenya Airways repercuta en la pérdida de empleos.
La policía antidisturbios hizo acto de presencia en el aeropuerto, e incluso llegó a lanzar gases lacrimógenos sobre los huelguistas. Muchos pasajeros y huelguistas tuvieron que recibir asistencia médica tras inhalar dichos gases. El secretario general del sindicato KAWU fue arrestado en el propio aeropuerto por la mañana, pues las autoridades consideran que esta huelga es “ilegal” y un “sabotaje”.
Según ha indicado el Ministro de Transportes, James Macharia, la Autoridad Keniana de Aeropuertos (KAA, según siglas en inglés), con la ayuda de las fuerzas de seguridad y de Kenya Airways se encargo de reemplazar en sus puestos a las personas en huelga. De igual manera, el ministro Macharia afirmó que el tráfico de vuelos debería irse reanudando gradualmente.
El movimiento de protesta no solo ha afectado al aeropuerto internacional de Nairobi, el más importante de Kenia y el 1º en términos de tráfico en el África Oriental, sino también a los otros dos aeropuertos principales del país, el de Mombasa (sureste) y el de Kisumu (oeste).
Fuente: Slate Afrique
[Traducción, Javier Ramos López]
[Fundación Sur]
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