BRUSELAS. Declaraciones completas de la eurodiputada Ana Gomes donde explica los motivos que han llevado a la UE a no enviar observadores a Angola para las elecciones del 31 de agosto de 2012.
Angola no ha sido considerado como país prioritario, al hacerse la lectura del significado político de lo que sucedió en 2008, al ignorar las autoridades angoleñas las recomendaciones que hizo la misión de observadores enviada en aquel entonces y dirigida por Dña. Luisa Morgatini.
El gobierno incumplió las recomendaciones de 2008
Al contrario de lo que sucedió en 2008, la UE no envió una Misión de Observación Electoral para los Comicios en Angola debido a que para un país de esa dimensión, debería involucrar por lo menos cerca de un centenar de profesionales. Esta vez la UE solo envió dos peritos a Luanda (que están elaborando interesantísimos informes.)
La observación de las elecciones angoleñas no ha sido considerada prioritaria en la UE y el Parlamento Europeo sopesó esta decisión.
EL PE interviene actualmente en la determinación de las misiones a enviar, a través de un Grupo de Trabajo sobre observación electoral al que yo pertenezco y que es regularmente consultado por la Alta Representante señora Ashton, justamente con el fin de definir prioridades. Al ser las misiones de observación muy costosas, el PE opina que, además de otras acciones democráticas, solo vale la pena enviarlas a países donde hay, por parte de las autoridades y de la oposición, verdadera motivación para un proceso de transición o de consolidación democrática.
Angola no se consideró un país prioritario porque se hizo la lectura del significado político de lo que pasó en 2008, y por ignorar las autoridades angoleñas las recomendaciones de la misión de observación de entonces, tal y como lo explicó, recientemente un portavoz de la UE. Significa que a través de la experiencia de 2008 y de la posterior actitud gubernamental, la UE dedujo que no había voluntad por parte de las autoridades angoleñas para tener presente a observadores independientes.
El propio hecho del retraso en el envío de las invitaciones para la observación (la UE solo actúa donde es formalmente invitada para hacerlo con garantías escritas de independencia y total acceso para los observadores). Al percatarse de que tales garantías no serían dadas, esto solo reforzó la percepción de que no valía la pena correr el riesgo de ir a Angola, para dar credibilidad a un proceso que desde su partida se preveía envenenado.
Claro que la oposición angoleña desde los más variados ámbitos insistió en que quería la observación de la UE. Pero el presidente Durao Barroso, cuando hace meses visitó Angola, en lugar de empeñarse en convencer a sus interlocutores de que sería interesante para Angola tener observadores de la UE, presintió la disposición gubernamental y de manera preventiva (para la campaña electoral a financiar dentro de pocos años…) trató de callar a la oposición con el pretexto de crisis presupuestaria en la UE. Y al mismo tiempo, me dicen que para contentar el lado gubernamental trató de alardear que la democracia angoleña estaba ya en un nivel que dispensaba observación…
En fin, por ineptitud y arrogancia de la Comisión Nacional Electoral, CNE, el activismo de jóvenes rappers y manifestantes civiles y militares entre otros, las cosas terminaron corriendo en contra de lo que el MPLA preveía. Y en un cierto momento, las autoridades angoleñas concluyeron que para dar credibilidad, estaría mejor replegar algunos tontos para que hicieran “turismo electoral” en el lugar que ellos les destinasen. Y por ello de repente se lanzaron en un frenesí de encontrar algunos observadores internacionales. Ha sido seguramente este hecho por el que recibí la invitación de la CNE angoleña, la cual rechacé. (Tal y como ya lo explique hace días).
Traducción del original en portugués, publicado en:
www:club-k.net.com y
http://causa-nossa.blogspot.pt el 31/08/2012
