Una agenda panafricana para el siglo XXI

6/07/2017 | Crónicas y reportajes


Notas sobre la sesión de apertura del 2º Festival Cultural e Intelectual de Kwame Nkrumah

El objetivo general de la conferencia era establecer modos de profundizar la unidad africana e identificar pasos prácticos concretos para trazar el camino hacia el panafricanismo en el siglo XXI ante la renovada agresión imperialista.

El lunes 26 de junio de 2017, un evento muy importante para el futuro de la familia Africana Global tuvo lugar en suelo africano, en la Universidad de Ghana, Legon, Ghana. Fue una reunión de africanos y pan-africanistas, académicos, activistas, líderes políticos, estudiantes y jóvenes de todo el mundo en la ceremonia de inauguración de la 2 ª Kwame Nkrumah Pan-African Intelectual and Cultural Festival.

horace_cambell.jpgEn un día caracterizado por la seriedad de propósito, la coincidencia de ideas y sentido de la misión, la base de la reunión fue establecida por el Profesor Horace Campbell Presidente de laorganización de Estudios Africanos, Kwame Nkruma que, al dar la bienvenida a los participantes, proporcionó lo que sólo puede describirse como una magistral «Actualización» del estado de la condición de Negro a nivel mundial. El Prof. Campbell logró el objetivo simultáneo de actualizar a los participantes sobre las luchas específicas en regiones específicas, y también demostró a todos y a cada uno cómo sus luchas están interrelacionadas.

En lo que fue descrita por Joseph Engwenyu, un historiador de Uganda, como la ceremonia de apertura más poderosa de cualquier conferencia mundial a la que haya asistido, no quedó nada sobre el tema que no fuera mencionado y analizado en el discurso de bienvenida de Campbell: desde las luchas contra el neoliberalismo en América Latina y el derrocamiento deliberado de los estados legales de Libia, Irak y Siria y África del Norte y Oriente Medio, agravando significativamente la vida de los ciudadanos negros en estos países, y lo que es más importante, invirtiendo las posibilidades de progreso económico y material del sistema pan- Africano que estaba siendo dirigido por Libia.

En su enumeración de los presentes, Campbell señaló la ausencia física de Haití, pero se sintió movido a invocar su presencia en espíritu, ya que afirmó que es imposible celebrar una reunión de esta naturaleza sin reconocer a Haití, por sus sacrificios en encender la llama de liberación de África globalmente.

De manera significativa Campbell destacó el hecho de la re-articulación de renovada agresión imperialista de los Estados Unidos contra las personas de color, tanto dentro como fuera de sus fronteras. A partir de esta evaluación, Campbell enfatizó que el objetivo final de la conferencia era establecer modos de profundizar la unidad africana e identificar pasos prácticos concretos para trazar el camino a seguir como una agenda para el panafricanismo en el siglo XXI.

Este tema de la necesidad de unidad fue sostenido y reforzado por fuertes mensajes de solidaridad, el más simbólico el de Samia Nkrumah, hija del presidente fundador de Ghana y eminente pan-africanista Kwame Nkrumah. Shamia insistió en la necesidad de reafirmar el mensaje de Nkrumah de unidad continental: una economía, una moneda, un ejército, una política exterior y un gobierno. Dada la convocación de la conferencia bajo el nombre de Kwame Nkrumah, la intervención de Samia fue una llamada de atención significativa que colocó la visión final de Nkrumah en el centro de la conciencia de los participantes.

La ceremonia de apertura fue presidida por el vicerrector de la Universidad de Ghana, Profesor Ebenezer Owusu. Después del discurso de bienvenida del Director del Instituto de Estudios Africanos Profesor Dzodzi Tsikata, hubo mensajes de solidaridad de Barbados, del ex Primer Ministro de Namibia, Nahas Nangula, del representante de las fuerzas de liberación del Polisario del Sáhara Occidental, MM Buyema y Samia Nkrumah, hija de Kwame Nkrumah. El Presidente de Ghana estuvo representado por el Profesor Kwesi Yankah, Viceministro de Educación.

El punto culminante de la reunión de esta ceremonia inaugural de más de 400 personas en el Gran Salón de la Universidad de Ghana fue el discurso presentado por el vicerrector de la Universidad de las Indias Occidentales, Sir Hilary Beckles, cuya contribución estableció la analítica de la situación y una guía programática del camino a seguir para el pan Africanismo para mediados del siglo XXI.

Al reflexionar sobre la condición africana en el contexto de reivindicación del mundo occidental de combatir una guerra contra el terrorismo, el profesor Beckles señaló que ninguna parte del mundo ha tenido una experiencia más brutal de terrorismo que el Caribe bajo la esclavitud europea. Habiendo establecido este hecho, Beckles sentó las bases para reflexionar sobre un proyecto panafricano futuro.

Su propuesta fue enmarcada dentro de un recuento de la postura adoptada por los principales estados africanos en la Conferencia Mundial de la ONU contra el Racismo en Durban, en la que, de acuerdo con su recuento, los líderes importantes de África abandonaron las delegaciones caribeñas en su petición de reparaciones. El poderoso símbolo que dejó Beckles fue el de una madre (África) abandonando a sus hijos que habían sido dispersados (el Caribe). Insistió en que algo se había roto y necesitaba ser reparado.

Beckles enmarcó su argumento en base de que el Caribe había «hecho su parte» por África, desde su contribución intelectual, moral y organizativa a las luchas contra el colonialismo y por la independencia a través de la labor de pan-Africanistas como George Padmore, la lucha contra el apartheid como se ve en el trabajo de artistas reggae como Bob Marley, a la contribución militar de Cuba en África meridional. Según la narración de Beckles, los hijos nunca se habían alejado de la madre, y que África, al dar la espalda a sus hijos en su momento de necesidad, había infligido una profunda herida en la relación que necesitaba ser sanada. Por lo tanto, Beckles sugirió que antes de tomar cualquier movimiento hacia adelante, la madre África tendría que llegar a sus hijos en el África global, como parte del proceso de sanación.

Dejando de lado el simbolismo, este llamado a la madre África para llegar a sus hijos preparó el escenario para el ofrecimiento de una agenda práctica y programática que surgiría en la conferencia.

Esto no sólo incluyó el papel de África en apoyar la llamada a encabezar un movimiento exigiendo reparaciones, sino que impuso a la conferencia la necesidad de pensar en el tipo de agenda alrededor de la cual podría construirse un programa de integración entre África y el Caribe. Esto representa el primer marco para una agenda futura pan-Africana.

La segunda conclusión de Beckles, que creó un marco para un futuro programa de acción para el pan-Africanismo, fue su propio reconocimiento de una división entre Estados africanos y sociedad civil africana, que fue simbolizada en Durban con el apoyo a la petición de reparaciones por parte de la sociedad civil africana pero que fue rechazada por los Estados. Este reconocimiento de la división sobre la petición de
reparaciones fue visto como sintomático de una crisis más profunda del estado independiente postcolonial, en el que las élites se han cortado de las aspiraciones del pueblo.

Esto sentó el tono para un segundo tema mayor de agenda que saldría de la conferencia: la necesidad de reexaminar los fracasos de un proyecto de independencia dirigido por élites y, en consecuencia, los fracasos de un proyecto panafricano liderado por élites. De hecho, esto ha constituido, al tiempo de redactar, un aspecto muy importante de los aspectos teóricos y prácticos de la conferencia, con muchos de los documentos enfocados a reexaminar las ideas de Walter Rodney, CLR James, George Padmore, WEB Dubois, Amilcar Cabral, Frantz Fanon, Kwame Nkrumah y otros.

Además, la cuestión de superar muchos de los aspectos específicos del fracaso y retroceso de la independencia y el Pan-Africanismo se han incluido en la agenda. Así, cuestiones de educación, reforma agraria, moneda africana, soberanía económica, integración. De hecho, claramente , un reexamen de todos los aspectos importantes de los continuos fracasos aún en curso de la experiencia postcolonial fue fruto del reconocimiento de la división entre sociedad civil y Estados.

Finalmente, sobre todo lo demás, el tema de la conferencia fue «Global Africa 2063: Educación para la Reconstrucción y Transformación». La conferencia y la ceremonia inaugural crearon una excelente plataforma para futuros vínculos entre instituciones educativas entre África, el Caribe, América Latina y América del Norte y el replanteamiento de la esencia de la educación en un proyecto panafricano futuro hacia la realización del proyecto de la Unión Africana: una África unificada para el año 2063.

Dada la energía de la conferencia, la crisis del capitalismo global, el sentido de misión y el sentimiento de la urgencia del momento, el profesor Campbell se sintió movido para advertir que la unidad africana vendrá antes de 2063. Esperamos el anuncio formal de la Accra Declaration of Acción, como un paso adelante hacia el pan-Africanismo en el siglo XXI.

Tennyson S.D. Joseph

* Tennyson S.D. Joseph enseña en el Departamento de Gobierno, Sociología y Trabajo Social en la Universidad de las Indias Occidentales, Cave Hill. Es un escritor prolífico que escribe una columna semanal en The Nation. Es el autor de «Decolonization in St. Lucía: Polítics and Global Neoliberalism, 1945-2010», University Press of Mississippi, 2011.

Fuente: Pambazuka News

[Traducción, Jesús Esteibarlanda]

[Fundación Sur]


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