Un tribunal holandés dictaminó el día 30 de enero, que la subsidiaria nigeriana de Royal Dutch Shell es responsable de un caso de polución petrolera en el Delta del Níger, y ordenó a la multinacional petrolera que pagase los daños causados, en una decisión que podría abrir la puerta a más demandas judiciales.
La sentencia dice que la compañía debe compensar a un agricultor, pero desestimó las otras cuatro reclamaciones presentadas contra la compañía.
Cuatro ciudadanos nigerianos y el grupo activista de Friends of the Earth, presentaron una demanda en 2008, en La Haya, donde Shell tiene su sede global, pidiendo reparación por la pérdida de beneficios de sus tierras y aguas contaminadas en la región del Delta del Níger, el centro de la industria petrolera de Nigeria.
Este caso era considerado por activistas medioambientales como una prueba para responsabilizar a las multinacionales por los daños causados en los países donde explotan el petróleo, mediante empresas subsidiarias, pero que en realidad pertenecen a la compañía al 100%, como la del caso de la sentencia, y algunos expertos legales dicen que los nigerianos afectados por la polución podrían tener la posibilidad ahora de presentar demandas en Holanda, sede de la compañía matriz.
Shell dice que este caso no sentará precedentes porque la compañía matriz no ha sido considerada culpable.
El agricultor que obtendrá una compensación, Friday Akpan, es un hombre de 52 años, con 12 hijos, y dice estar muy feliz por la sentencia, porque le permitirá pagar sus deudas.
“El vertido de petróleo destrozó 47 estanques de pesca, mató todo el pescado y dejó inutilizables los estanques”, declaró a la agencia Reuters, en Port Harcourt, Nigeria.
Un experto legal dice que esta sentencia podría hacer posible que otros nigerianos, que también han sufrido la pérdida de su medio de vida y enormes pérdidas como Akpan, debido a la actividad de Shell, podrían presentar demandas judiciales en Países Bajos. “El hecho de que una subsidiaria haya sido considerada culpable en Holanda, abre nuevos caminos”, declaró Menno Kamminga, profesor de derecho internacional en la universidad de Maastricht.
El tribunal no examinó el papel de la compañía matriz, pero también examinó los abusos cometidos por Shell Nigeria, donde la relación con Holanda es muy limitada”, “esto es un verdadero progreso”.
El portavoz de Friends of the Earth, Geert Ritsema, dijo que el grupo apelaría las otras sentencias en las que se declaró a Shell Nigeria inocente, “porque todavía hay mucho petróleo vertido que debe ser limpiado”.
El tribunal apoyó la argumentación de Shell que dice que los vertidos han sido causa de los sabotajes y no de la falta de mantenimiento de sus instalaciones, como alegan los nigerianos.
Sólo el año pasado, 2012, se produjeron 198 vertidos de diversas instalaciones de Shell en el Delta del Níger, vertiendo alrededor de 26.000 barriles de petróleo, según datos de la compañía. Shell dice que 161 de estos vertidos fueron causados por sabotajes o robos, mientras que 37 incidentes fueron causados por fallo de funcionamientos de sus sistemas.
Pero las comunidades locales dicen que Shell informa de una mínima parte de los vertidos y las cantidades vertidas.
Los pueblos que viven en el Delta del Níger dicen que su tierra, agua y recursos pesqueros han sido asolados por años de polución petrolera y los activistas piden a las compañías que trabajan en Nigeria que mantengan los mismos estándares que en el resto del mundo.
Un informe de la ONU de 2011, sobre la situación en la región de Ogoniland, dentro del Delta del Níger, criticaba a Shell y a otras compañías multinacionales extranjeras y al gobierno de Nigeria, por 50 años de polución.
Una década de militancia armada de varios grupos del Delta del Níger, tiene sus orígenes en esta polución y la impotencia de las comunidades locales. Las actividades de estos grupos, [como los MEND o Movimiento para la emancipación del Delta del Níger, cuyo líder, Henry Okah acaba de ser juzgado en Suráfrica] lograron reducir a casi la mitad la producción de petróleo en su región, hasta la amnistía que se concedió a los rebeldes en 2009.
En el Delta de Níger, región pequeña pero responsable de más de la mitad de toda la producción de petróleo exportado por el país, viven alrededor de 31 millones de personas.
(The Punch, Nigeria, 31-01-13)