Las violaciones generalizadas de los derechos humanos, la represión brutal de los musulmanes etíopes, incluyendo asesinatos de creyentes inocentes, arrestos arbitrarios, y detenciones ilegales, siguen teniendo lugar en Etiopía, sin que el régimen del EPRDF lo detenga.
Según una emisión de la agencia Voice of America, VOA, servicio en amárico, del 22 de octubre de 2012, y otras muchas fuentes creíbles, el 21 de octubre, al menos cuatro personas fueron asesinadas, que se haya confirmado, en la ciudad de Gerba, al sur de Wello, en el estado regional de Amhara, cuando la policía federal disparó munición real contra una protesta pacífica.
Según los testigos que informaron al Consejo de Justicia Nejashi, NJC por sus siglas en inglés, dos personas fueron asesinadas por disparos en la cabeza, mientras eran transportadas al hospital para asistencia médica, después de haber resultado levemente heridos.
Se ha informado de que los enfrentamientos se produjeron cuando la policía intentó arrestar a uno de los representantes de la juventud musulmana de la zona. Además de los asesinados, más de 15 personas resultaron gravemente heridas, y decenas de musulmanes arrestados. La televisión satélite de Etiopía, ESAT, informó citando a los residentes de la zona, sobre que las fuerzas de seguridad federales rodearon la ciudad de Gerba, sin aviso previo, y la población fue aterrorizada.
Hay que recordar que los musulmanes de Etiopía han estado protagonizando manifestaciones pacíficas durante casi un año, contra la interferencia del gobierno en sus asuntos religiosos y el gobierno ha optado por silenciar a los musulmanes a la fuerza.
Hace siete meses, el 27 de abril de 2012, la policía federal cometió una matanza similar contra los musulmanes en la ciudad de Asasa, de la zona de Arsi, en el estado regional de Oromia, que dejó más de cinco muertos. Este excesivo uso de la fuerza contra inocentes y civiles no combativos pone de relieve el total desprecio del gobierno de Etiopía por la inviolabilidad de la vida humana.
El Consejo de Justicia Nejashi condena, en los términos más firmes, y denuncia estos actos criminales tan brutales cometidos por las fuerzas de seguridad de Etiopía, contra inocentes musulmanes de la zona de Sur Wello, y pide a los grupos de derechos humanos internacionales y etíopes, que defiendan los derechos de los musulmanes etíopes y se unan al NJC, para denunciar las crecientes violaciones graves de los derechos humanos por parte del gobierno etíope.
El NJC también pide al gobierno de Etiopía que detenga la respuesta sangrienta contra las demandas pacíficas de los musulmanes de Etiopía. Los musulmanes de Etiopía no están demandando en sus manifestaciones pacíficas, nada más allá de los legítimos y constitucionales derechos que les corresponden.
El Consejo de justicia Nejashi es una organización sin ánimo de lucro, independiente con la misión de promocionar la justicia y la igualdad, y concienciar sobre los abusos de los derechos humanos en Etiopía. Actualmente el NJC está registrado en el distrito de Columbia. www.nejashijustice.org
(Ethiomedia, 29-10-12)
