Uganda: la pobreza incide menos en los hogares rurales que en los urbanos

22/06/2009 | Crónicas y reportajes

Los males económicos de la pobreza y el desempleo son ahora más pronunciados en las ciudades que en el campo, según un nuevo estudio realizado por el gobierno de Uganda, basado en las estadísticas de 2002/3 y 2005/6. No se puede deducir de las estadísticas, sin embargo, si la incidencia de la pobreza y el desempleo en los hogares rurales implica que los habitantes de los pueblos disfrutan de un bienestar mayor que los chabolistas de las ciudades. Pero el nerviosismo está aumentando en Uganda ante las estadísticas sobre la mano de obra del país que revelan que 1.3 millones de ugandeses está empleado por debajo de sus posibilidades.

Esto significa que uno de cada 10 ugandeses, el 12 % de una población de 10.9 millones de personas empleadas en el país, está trabajando por debajo de su potencial, haciendo que la producción de su lugar de trabajo vaya en descenso, y puede que haciendo que los empleadores paguen más a sus empleados por menos producción. Ubos, la institución del gobierno encargada de recopilar, analizar e interpretar los datos socioeconómicos para predecir la tendencia del futuro, asegura que un total de 1.7 millones de ugandeses, de entre edades de 14 y 64 años, están desempleados o empleados por debajo de su capacidad.

Aunque la mano de obra creció en 1.1 millón de personas, desde 2002 /3 hasta 2005/6, la generación de puestos de trabajo no creció al mismo ritmo para compensar este crecimiento, dejando fuera del mercado laborar a miles de jóvenes cualificados. Sin embargo, los trabajos de servicios civiles han aumentado en un 6 % en 2008, posiblemente debido a la creación de nuevos distritos, pero las nuevas oportunidades eran inadecuadas para absorber a los 400.000 demandantes de empleo que salen de las instituciones educativas cada año.

Otro dato oficial muestra que cada año, el país crea sólo 18.000 nuevos puestos de trabajo. “La disponibilidad de oportunidades de empleo productivo generalmente reduce la pobreza”, señala el resumen de las estadísticas de junio de 2009.

Dentro de los tres años revisados, se ha observado que hay más gente de los suburbios de las ciudades en paro que en los pueblos, un fenómeno atribuido a la todavía popular idea de la población rural que se amontona en las ciudades de que ahí tendrán mejores oportunidades. La migración, irónicamente ha dado como resultado el empeoramiento de los niveles de pobreza en las ciudades.

El más alarmante de los resultados del informe es que sólo alrededor de 545.000 ugandeses (o lo que es lo mismo un 5 % del total de la población en edad laboral) tiene un trabajo permanente, indicando que los empleados temporales o por obra y servicio, más los del sector de la economía sumergida son responsables en gran medida del crecimiento del 7 % del producto interior bruto del país.

Aunque el gobierno, en los últimos años ha anunciado a bombo y platillo un enorme aumento en los sectores de manufactura y servicios, el informe de Ubos desvela que el 70 % de loa ugandeses productivos todavía trabajan principalmente en la agricultura de subsistencia.
El informe, de 252 páginas, destaca la caída significativa de los niveles de pobreza en los hogares, especialmente en las zonas rurales, mientras que en el distrito de Mbarara, en el oeste, sin embargo, hasta 400.000 personas han caído por debajo de los niveles de pobreza, una manifestación aparente del fracaso de las diversas intervenciones del gobierno para reducir la pobreza.

El informe concluye que el norte de Uganda es la región con más pobreza, donde se concentran los más pobres de los pobres.
Aunque los puestos de trabajo formales han descendido en un 2 %, entre 2002/3 y 2005/6, el actual gasto de los empleadores en pagar salarios ha aumentado, debido a la subida de la paga de sus trabajadores, para contrarrestar los efectos de la inflación de dos dígitos. Las fábricas de cerveza y de tabaco, ambos considerados productos de lujo y tóxicos, son los que mejor pagan a sus empleados, con un salario medio mensual de 1.400.000 chelines [unos 615 euros].

(The Monitor, Uganda, 22-06-09)

Autor

Más artículos de Administrador-Webmaster