Internet se apagó durante las elecciones a la presidencia en Tanzania y las protestas que acontecieron en el país desde el mismo día del plebiscito. A medida que vuelve a ponerse la conexión a disposición de la ciudadanía, tras un parón de 6 días, el gobierno ha presionado a la población con el fin de “no compartir imágenes y vídeos que causen pánico”. Las autoridades publicaron un comunicado el pasado lunes indicando que compartir las imágenes de esos días que pudieran causar “pánico o degraden la vida humana» podría dar lugar a un cargo por traición al país. Se ha dado el caso de una cuenta en las redes sociales, que publicaba vídeos e imágenes de las víctimas durante las protestas, que ha sido suspendida tras comenzar a conseguir seguidores.
Aunque aún no se ha establecido ninguna declaración oficial del gobierno, la presidente reelecta, Samia Suluhu Hassan, ha reconocido que se ha producido “una pérdida de vidas», urgiendo a las agencias de seguridad a garantizar la vuelta a la normalidad.
Human Rights Watch, un organización internacional sin ánimo de lucro, ha condenado la represión ejercida por las fuerzas de seguridad en el país, señalando que “más de 1000 personas han fallecido” durante las protestas. Además, ha demandado la restauración de internet por atentar contra la libertad de expresión e información.
Fuentes: Qiraat African News – Africa News
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