Las conversaciones de paz en Sudán del Sur, que comenzaron el 5 de febrero en Addis Abeba, se estancaron después de que la delegación del gobierno se opusiera a una cláusula que pedía medidas punitivas contra los saboteadores del proceso de paz. Las conversaciones bajo la mediación de la Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo (Igad) se estancaron el jueves, después de que los mediadores y la oposición agregaran la cláusula que permitiría a la región y los patrocinadores imponer medidas punitivas contra las personas que violan el proceso de paz.
El gobierno del presidente Salva Kiir siente que está siendo blanco de sanciones y no puede ser tratado de la misma manera que los rebeldes, ya que a diferencia de los rebeldes ellos tienen «un país para gobernar y mantener la ley y el orden». La principal objeción de la delegación gubernamental encabezada por el Ministro de Asuntos Presidenciales, Martin Lomoru, es el Artículo 28 del acuerdo sobre la Declaración de Principios, que formará las directrices para las conversaciones que establece que la «Igad debe tomar todas las medidas necesarias, incluidas las decididas por los jefes de Estado y gobierno de los Igad en noviembre de 2014 contra los que arruinan la paz».
Fuentes diplomáticas en Addis Ababa afirmaron que la delegación gubernamental se opuso a las inserciones de que se permita a las Naciones Unidas castigar a los saboteadores individuales que creen que es la agenda impulsada por la Troika: los Estados Unidos, el Reino Unido y Noruega, que son los principales patrocinadores de la Proceso de paz de Sudán del Sur.
Los mediadores de Igad se vieron obligados a formar un subcomité que negociará un compromiso a medida que las conversaciones continúan en otras áreas, como la composición del ejecutivo, el parlamento, los arreglos de seguridad y las reformas judiciales.
La delegación gubernamental boicoteó la primera sesión ya que los mediadores de la Igad solo admitían a 12 de sus 50 delegados. Los mediadores luego permitieron que toda la delegación gubernamental, en el segundo día, participara en las conversaciones. Anteriormente, el ministro de Información, Michael Makuei, quien también es el portavoz del gobierno, había declarado que Juba no aceptaría la reconstitución del gobierno y la cuestión de los dos ejércitos.
Una vez que se reanuden las negociaciones, los delegados discutirán la efectividad y la composición del Gobierno de Transición de Unidad Nacional cuyo mandato termina en octubre, la composición del parlamento, los arreglos de seguridad y las reformas judiciales. Las conversaciones finalizarán el 16 de febrero.
[*La Cumbre Extraordinaria de los Jefes de Estado de la Igas celebrada en Addis Abeba en noviembre de 2014 estableció que cualquier violación del cese de las hostilidades por parte de cualquier parte invitará a la región a tomar medidas colectivas contra los responsables de tales violaciones. Dicha acción incluye la congelación de activos, la prohibición de viajar dentro de la región, la denegación del suministro de armas y municiones y cualquier otro material que pueda utilizarse en la guerra.]
Fuente: All Africa News
[Traducción, Muriel balda Aspiazu]
[Fundación Sur]
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