Sudáfrica ha exigido a Israel la liberación inmediata de los activistas secuestrados tras la interceptación de la flotilla humanitaria Global Sumud el 1 de octubre de 2025, que se dirigía a Gaza con ayuda para la población civil. Entre los retenidos figura Nkosi Zwelivelile «Mandla» Mandela, nieto del expresidente sudafricano Nelson Mandela, lo que ha intensificado la presión diplomática sobre el gobierno israelí. El presidente sudafricano, Cyril Ramaphosa, calificó la operación como un secuestro en aguas internacionales y una violación del derecho internacional.
La Palestine Solidarity Campaign (PSC), con sede en Sudáfrica, denunció la acción como un “acto de piratería” y acusó a las fuerzas israelíes de usar drones, cañones de agua y tácticas de fuerza contra civiles desarmados. La flotilla, compuesta por más de 40 embarcaciones con participantes de más de 40 países, tenía como objetivo romper el bloqueo a Gaza y entregar ayuda humanitaria.
Israel interceptó y detuvo a decenas de activistas internacionales, incluidos ciudadanos sudafricanos. Las autoridades israelíes anunciaron que los detenidos serían deportados en los próximos días, mientras se mantiene retenida la ayuda humanitaria transportada por la flotilla.
Esta agresión se suma a las crecientes denuncias internacionales por las violaciones del derecho humanitario en Gaza. Sudáfrica, que ya ha presentado un caso contra Israel ante la Corte Internacional de Justicia, advierte que impedir el paso de ayuda humanitaria constituye una violación directa de las medidas provisionales dictadas por el tribunal y el derecho internacional vigente.
Fuentes: IOL – Europa Press
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