El 20 de febrero de 2012 tuvo lugar en Cotonou una mini cumbre de la Unión africana sobre la seguridad en el Sahel, con el contexto especialmente degradado de la seguridad pública en la zona sahelo-sahariana, sobre todo en Mali donde desde mediados de enero un rebrote de la violencia ha provocado una grave crisis con el éxodo de decenas de miles de personas. Francia presiona a las autoridades malienses para que inicien negociaciones con el MNLA (Movimiento Nacional de Liberación del Azawad). El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los refugiados (ACNUR) ha pedido 35,6 millones de dólares (26,5 millones de euros), el viernes 24 de febrero, para ayudar a casi 85.000 personas que han huido de los combates entre el ejército regular y la rebelión tuareg y que llegan a un ritmo de 800 a 1.000 nuevos refugiados por día a Mauritania y Burkina Faso. He aquí algo que precisamente no da tranquilidad en esta parte de la zona gris del Sahel.
Una situación preocupante
El Poder en Nuakchot [capital de Mauritania] ciertamente no se deja engañar y entiende que arriesga mucho con esta situación altamente preocupante que añade a los graves problemas alimenticios y humanitarios otro del dominio de la seguridad pública, mientras que los combatientes del MNLA siguen con su estrategia de acoso mediante sus ataques en el norte de Mali. Según las noticias del 24 y 25 de febrero, habrían lanzado un ataque comando dirigido por el teniente coronel Moulay (en Gouma Koro, en la región de Ségou) donde enfrentamientos muy violentos duraron más de seis horas y media, produjeron graves pérdidas en ambas bandos e incendiaron el campamento militar.
Esto es tanto más cierto, que hay rumores en auge a propósito de la participación de AQMI [Al Qaeda del Magreb Islámico] al lado del MNLA en los combates, tal como afirma Bamako [capital de Mali], mientras que el MNLA por su parte afirma que está trabajando en la debilitación de los grupos AQMI recuperando progresivamente todos aquellos que eran utilizados y explotados por la nebulosa islamista. Mejor aún, el MNLA ha solicitado en su último comunicado la formación de un grupo de expertos internacionales para esclarecer la utilización por parte de Mali de pilotos mercenarios ucranianos que organizan discretamente masacres sobre poblaciones civiles y sobre rebaños de ganaderos nómadas, cuando bien es sabido que la única riqueza de esta región es la ganadería. Pero también para esclarecer el papel de estos pilotos mercenarios en lo que ocurrió en la localidad de Aguelhok los días 20 y 24 de enero de 2012.
De hecho, algunos piensan que los emires de AQMI se quedaron muy sorprendidos por este alzamiento de los tuareg, el cual no se esperaban ya que vuelve a cuestionar su autoridad en la región y, por una parte, les hace perder la mano de obra local mientras que por otra, se arriesgan a perder todos los asentamientos locales en la región del Azawad.
Francia al rescate de Amadou Toumani Touré
Un ping-pong de palabras entre el poder maliense y la rebelión tuareg hace que sea difícil el regreso a una situación de paz, mientras que el país debe organizar en breve (el próximo mes de abril) las elecciones presidenciales. Un cierto contexto político puede quizás ser el origen de esta guerra malo-maliense, ya que el presidente saliente Amadou Toumani Touré (ATT) no puede presentarse a otro mandato.
He aquí por lo que Francia, que sólo busca su propio interés, quiere mantener la integridad del territorio maliense (el MNLA y otros rebeldes tuareg, entre los cuales algunos miembros del movimiento del 23 de mayo, quieren en cuanto a ellos, liberar “el pueblo del Azawad” de la “ocupación”, según la rebelión), y se esfuerza para que se entable un diálogo entre el presidente maliense y el MNLA.
“Efectivamente, la única forma de detener la violencia es hablando. Por lo tanto incitamos al gobierno maliense a que dialogue con todas las partes concernidas, y por supuesto el MNLA incluido”, reitera el Sr. Alain Juppé [Ministro de Asuntos Exteriores y Europeos francés] que afirma que el presidente maliense “le parece abierto a esta perspectiva. En cualquier caso, es lo que recientemente me ha confirmado por teléfono. En principio, no se niega”, confirma el Sr. Juppé, no sin añadir: “Francia no tiene lecciones que dar ni reproches que formular. Sabemos hasta qué punto es difícil controlar este tipo de situaciones”.
¿El MNLA está al servicio de Mauritania?
Esperando que esto se esclarezca, una cosa es segura: la insurrección tuareg ha atado corto a AQMI que, en el contexto actual, ya no puede ejecutar su plan de agresión contra Mauritania sin perjudicar o a la rebelión tuareg o al ejército regular maliense, basculando de golpe de un bando contra el otro.
Nuakchot lo sabe y no ha dudado en acoger, identificar y registrar las poblaciones desplazadas desde Mali incluso en situación de total indigencia, como si de repente el MNLA se volviese más bien útil. ¿AQMI también lo será para Bamako? ¿O Nuakchot, Bamako y el MNLA comprenderán que luchan juntos en la misma batalla cuyo propósito habrá sido, por las buenas o por las malas, detener a AQMI?
Mohamed Ould Khattatt
Agencia Nuakchot de información, ANI. Mauritania, 4 de marzo de 2012.
Traducido para Fundación Sur por Juan Carlos Figueira Iglesias.
