Hay una razón por la que no podemos «seguir adelante» y salir del apartheid. Sus efectos son todavía absolutamente reales para los sudafricanos negros. Según Verashni Pillay, el hecho de que ahora estemos, más o menos igual no borra, de ninguna manera, las secuelas de siglos de desigualdad económica estructural que son en gran parte un problema racial.
Al parecer, algunos sudafricanos blancos todavía piensan que el resto de nosotros debe superar el apartheid y, según su frase, «seguir adelante».
Lo sé porque un amigo blanco que ha estado viviendo en otro lugar en el continente me dijo, en una reciente visita, que ella todavía escuchaba este tipo de cosas en sus círculos blancos en Sudáfrica. El tipo de cosas que los sudafricanos blancos sólo dicen cuando piensan que están «solos» son increíbles. Pensé que habíamos terminado con esto, pero, evidentemente, no es así.
Sé lo que estás pensando: otra columna periodística sobre el racismo. ¿Sabes qué? Estoy bastante cansado de hablar sobre el racismo, pero aún estoy más cansado de las personas que dicen que estos hechos no existen.
El apartheid puede haber terminado hace más de 20 años, pero eso no es nada. Los Estados Unidos se encuentran inmersos aún en una tensa carrera, más de 50 años después de que la segregación racial terminara oficialmente. Tengo la sensación, cuando hablo con algunos sudafricanos blancos, de que realmente ellos creen que he tenido las mismas oportunidades en la vida que ellos. Es risible.
Así, una vez más, he aquí una pequeña lista de algunas de las razones por las que los sudafricanos blancos todavía están por encima de nosotros y de los sudafricanos negros en particular.
1. Riqueza generacional
Así es como esto funciona: la mayoría de los padres o abuelos blancos sudafricanos pudieron comprar y poseer bienes y empresas o participaciones en negocios. Ellos fueron capaces de pagar sus propiedades o expandir sus negocios gracias a un trato preferencial y al empleo.
Ellos fueron capaces de dejar los beneficios de estos ingresos y esta riqueza a sus hijos, a nuestros contemporáneos, ya sea como herencia o como un inicio en su vida financiera.
La mayoría de los sudafricanos negros no tienen tal ayuda al inicio. Se levantan y caen con sus propios esfuerzos, solos y hay muy poca red de seguridad si no lo consiguen. La riqueza de la familia ya está bastante extendida para cubrir a los que nada tienen.
Cuando mis amigos negros dicen que están arruinados, significa que su deuda familiar, ya ha dado vueltas y vueltas por los usureros y no saben que más hacer. Cuando mis amigos blancos dicen que están arruinados por lo general significa que pueden tener que echar mano de sus ahorros o tragarse su orgullo y pedir ayuda a sus padres.
No voy a recibir ninguna herencia, ni una póliza que me pague una gran suma de dinero en algún momento de mi vida, ni un piso pagado con muy poco o ninguna hipoteca. Esto son las reservas de aquellos que han tenido antepasados para construir este tipo de riqueza y la transmiten.
2. El capital social
La mayoría de los sudafricanos blancos tienen tantos recursos que pueden aprovechar, aunque no sean estrictamente financieros. Tienen a amigos de la familia y a la propia familia colocada en puestos de alto nivel en diversas de sus industrias. De esta manera, obtienen información privilegiada y ayudas cuando las necesitan.
El capital social es difícil de definir pero es omnipresente.
Son los portátiles que sus padres le permiten usar, las ropas caras que tienen que causan una impresión en una entrevista de trabajo, por no hablar de los buenos modales y el acento que han aprendido a lo largo de su vida.
Es el hecho de poder hacer una referencia a una música adecuada o una broma literaria que demuestre que su educación es superior a la que tú pudiste obtener. Es una cultura familiar de éxito y un ambiente que conduce a ello.
Y eso no es algo que tú te hayas ganado.
3. Desarrollo de la primera infancia
Cuando un niño negro logra un gran éxito esto rápidamente se convierte en noticia, ¿por qué? Porque ha tenido que superar dificultades, la mayoría de las veces invisibles para los demás. Esto ya por no hablar de las desventajas de vivir en una zona o municipio rural.
La mayoría de los sudafricanos blancos tienen padres lo suficientemente educados como para saber darle alimentos saludables, desarrollar sus habilidades motrices y enseñarles a leer de manera que a los 5 años ya están por delante de sus compañeros negros de la localidad, una ventaja que les dará rendimientos exponenciales según se vaya desarrollando su educación.
Pregunte a cualquier experto en desarrollo infantil temprano: las ventajas que le dieron antes de la edad de cinco años, antes de tener que hacer ni un ápice de trabajo, habrán establecido un curso muy favorable en su vida. Así que no dé a ninguna persona joven negra expectativas sin haber tenido que trabajar «como Ud. las tuvo». No tiene idea de lo que tiene.
4. El beneficio de la duda
Desearía que cada persona blanca que piensa que la raza no es un problema tan grande y que «todos somos humanos» pudiera caminar como una persona negra durante un día en un área predominantemente blanca.
Verá gente que cruza la carretera para evitarte, o que no te mira a los ojos.
Tendrás jefes que asumen que eres perezoso, por lo que te obligará a trabajar más duro que a tus compañeros blancos para demostrar lo contrario.
Restaurantes y clubes pueden o no dar un buen servicio, pero habrá una conciencia diferente en torno a tu persona, una burbuja de aire que atraerá miradas encubiertas o animosas.
O se te insultará, profunda y personalmente, cada vez que alguien haga una broma acerca de tu nombre, de dónde eres, de tu incapacidad para nadar, de que te guste el pollo o cualquiera de las otras cosas típicas.
5. Un financiera ventaja inicial
La mayoría de mis amigos blancos en Sudáfrica tuvieron la suerte de conseguir su primer coche de sus padres y su título universitario casi totalmente pagado, si es que no fueron capaces de obtener una beca. He tenido algunas experiencias muy peliagudas en mi vida, pero el estrés de tener que pagar mi título universitario casi me hizo enfermar gravemente.
Tenía dos préstamos y un coche que pagar después de salir de la universidad y eso después de que tuve un poco de ayuda dirigida a las personas de color, ya sabes, esas políticas de acción afirmativa que algunas personas blancas creen que son las cosas crueles y más injustas de la historia.
Tuve que trabajar en tres empleos a tiempo parcial en mi último año en la universidad para cubrir algunos de mis gastos y permitirme el traslado a Ciudad del Cabo para mi primer trabajo, y el costo de la vida para el primer mes hasta que me pagaron mi primer sueldo.
Para muchos sudafricanos negros la situación será aún peor. Ellos no serán capaces de llegar a la universidad, si es que pueden ir a la escuela y tendrán que trabajar de inmediato para ayudar a la familia.
Pero esto no es un hecho del azar de la vida. Es un resultado directo de las políticas económicas del apartheid que dejaron generación tras generación de indigentes de modo que para las primeras generaciones de negros tratando de construir su vida en la post-apartheid de África del Sur es como correr una carrera con pesas de plomo en los pies y eso incluso con las diversas políticas y ayudas de acción afirmativa que proporcionan.
6. Padres autosuficientes
¿Adivinan que tendrán que pagar la mayoría de la gente de color, en este país, la primera vez que tengan un trabajo? Después de que hayan cancelado sus préstamos universitarios y sus coches tendrán que estar enviando dinero a sus padres y otros parientes que serían indigentes sin esta ayuda. La primera vez que lo escuché fue justo al revés para muchos de mis amigos blancos, me quedé atónita.
Lo que se puede hacer
Aquí le dejo una gran idea. Siéntese con uno de sus amigos negros y pídale que le digan cómo el apartheid ha afectado sus vidas. Hay tantos tipos diferentes de injusticia en este mundo. La raza es sólo una de ellas. Pero esta es la que la gente parece querer negar al máximo. Cuando mis amigos blancos me hablan de alguna experiencia traumática que afectó sus vidas lo que desde luego no les digo es que probablemente se lo están imaginando y que deberían «seguir adelante». Trato de escuchar y simpatizar con ellos. Trate de hacer lo mismo con las injusticias que otras personas han sufrido, incluyendo aquellas que son de índole racista.
Nota de la autora:
Sé que esto no es cierto para todas las personas de raza blanca o toda la gente negra. Estoy hablando a grandes rasgos aquí y ahora y siempre habrá excepciones.
Verashni Pillay
Mail & Guardian
Fundación Sur
