El Gobierno de Eritrea ha declarado que el acuerdo de paz de 2018 con Etiopía sigue en buen estado y que está progresando a pesar de los esfuerzos de los detractores para retratarlo como un fracaso. El ministro de Información, Yemane Meskel, publicó el estado general del acuerdo que marcó su segundo aniversario el pasado 9 de julio. «El progreso general logrado hasta ahora sigue siendo significativo para todos los estándares contemporáneos», escribió en un tweet. Agregando: «Esto es a pesar de los esfuerzos desesperados de las fuerzas regresivas de la inercia y la oscuridad, como el TPLF y sus semejantes, para hundir y revertir la paz duradera con sus dividendos para los dos países».

TPLF es el Frente de Liberación de los Pueblos de Tigray, el partido gobernante en la región etíope de Tigray, que comparte un largo límite con Eritrea, donde según los informes se encuentra el cruce fronterizo abierto, pero todos los demás han sido cerrados unilateralmente por Eritrea. En la actualidad, el TPLF es un partido situado en oposición al nuevo partido gobernante a nivel federal en Etiopía, el Partido de la Prosperidad, dirigido por el Primer ministro, Abiy Ahmed.

En las mimas declaraciones, el ministro de Información eritreo puntualizó: “El proceso de paz entre Eritrea y Etiopía ha catalizado un clima propicio para la cooperación regional. Sin duda, los desafíos sustanciales que aún quedan se escalarán en el período venidero a través de una acción decidida y concertada sobre la base de una visión compartida y la buena voluntad política prevaleciente […] Es importante recordar que no existe un tratado formal de paz entre Etiopía y Eritrea. Se han restablecido los controles fronterizos, las conversaciones sobre cooperación económica, las conversaciones estancadas sobre el uso de los puertos.

Rashid Abdi, un exinvestigador de Crisis Group que es un entusiasta de la observación política de la región del Cuerno y África Oriental, señala que “lo que mantiene unidos a Abiy e Isayas es su antipatía mutua hacia el TPLF y Tigray. Nada más”.

El segundo aniversario del acuerdo del 9 de julio llega en un momento en que Abiy está lidiando con una crisis interna en la que ha conseguido evitar las protestas en la capital y la región circundante de Oromía, pero en la que ya se han contabilizado más de 200 muertes y 3.500 arrestos, mientras que hoy es el décimo día consecutivo en que se corta el acceso a Internet.

Fuente: African news

[Fundación Sur]

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