Desde el sábado han muerto dos prisioneros que se encontraban bajo custodia policial, en las estaciones policiales egipcias de Zaytoon y Dar al Salam.
Respecto al primer caso, el Ministerio del Interior anunció que murió debido a insuficiencia circulatoria, mientras que la muerte del segundo de los casos se debió teóricamente a un coma diabético. Son muy numerosos los casos de prisioneros que fallecen mientras se encuenran bajo custodia, y parecen aumentar las detenciones de oficiales que se encuentran involucrados en estos casos.
El pasado sábado, un oficial de policía y dos de sus ayudantes fueron detenidos por orden de la Fiscalía General. Se les acusaba de torturar hasta la muerte a un detenido. Fueron los familiares de la víctima los que presentaron una denuncia contra los agentes por tortura, según informó el periódico estatal Al-Ahram.
El pasado 23 de abril también falleció un detenido en la comisaría Shubra Al-Khaimah. El Centro El Nadim para la rehabilitación de las víctimas de violencia ha documentado cientos de casos de torturas en las cárceles durante el mes de abril. Desde el comienzo del año, el número de muertes bajo custodia policial ha ido en aumento.
El mes pasado, tras la muerte de dos presos en una estación policial de El Cairo, la fiscalía examinó el lugar. Encontró que el número de detenidos en las celdas era de 380, mientras que la capacidad de éstas permitía a 100 prisioneros. A raíz de este suceso, se han multiplicado las visitas de la Fiscalía a los centros de detención de varias comisarías y se han registrado violaciones varias en muchas de ellas, entre las que se encuentra la comisaría Matariya. Ésta es conocida como la «casa de la masacre», en referencia a la abundancia de casos de tortura contra los detenidos; casos que se encuenran pendientes de investigación. Los miembros de la fiscalía calificaron las condiciones de las celdas como «inhumanas».
Adham Youssef
Daily News – Fundación Sur
