Un tribunal de Kigali ha puesto en libertad bajo fianza a varios miembros de la oposición detenidos por haber participado en una manifestación pacífica. Permanece sin embargo mudo sobre los llamamientos para que se haga una investigación de las torturas infligidas por la policía. Se ha rechazado la libertad provisional al Sr. Bernard Ntaganda, presidente fundador del PS Imberakuri, y la Sra. Alicia Muhirwa, tesorera de las FDU-Inkingi, debe comparecer de nuevo. Durante este tiempo, apenas hace dos días, la comisión electoral nacional clausuraba y publicaba su lista oficial de cuatro candidatos a las elecciones presidenciales, todos ellos miembros del sistema monocolor dominante.
Nos preguntamos por qué el régimen quiere gastar tantos recursos nacionales en una mascarada electoral tan evidente en vez de informar a los ruandeses y a la comunidad internacional que el candidato saliente no está dispuesto a consentir una elección seria. El régimen no está preparado para unas elecciones equitativas y transparentes: los partidos de oposición son machacados y sus dirigentes encarcelados y torturados; hay abogados que son llevados a la cárcel y periódicos independientes prohibidos; el periodista Jean Léonard Rugambage fue asesinado el 24 de junio y la periodista Agnès Uwimana del periódico Umurabyi ha sido detenida el 8 de julio.
En el transcurso de las audiencias ante el tribunal, los miembros de la oposición han mostrado heridas y marcas de torturas en el cuerpo, en la cabeza, brazos y piernas. Todas las víctimas de estas brutalidades han informado la Tribunal que la policía ha utilizado con ellos palabras etnistas y racistas. Durante todo el procedimiento, a la Sra. Alice Muhirwa, molida a golpes en el vientre por la policía, se le impidió fuera atendida. Sólo fue llevada urgentemente al hospital cuando se derrumbó ante el juez. Ello no ha impedido sin embargo que los medios afines al gobierno la hayan linchado difundiendo las palabras del portavoz de la policía que acusaba a la Sra. Muhirwa de simular torturas y pérdidas de sangre.
Pedimos al gobierno de Paul Kagame que, si desea aportar la prueba de que no ha sido él quien ha ordenado esos suplicios, suspenda de sus funciones a los oficiales implicados en las alegaciones de tortura y ponga en marcha una investigación independiente.
Por la estabilidad y la democratización de nuestro país, exigimos que cesen todas las acusaciones por motivos políticos contra miembros de la oposición, que nuestros partidos políticos sean reconocidos, que la elección presidencial sea aplazada para que nosotros también participemos en el proceso político.
Mme Victoire Ingabire Umuhoza
Presidenta de FDU Inkingi
(COMUNICADO DE PRENSA. Kigali, 09 de julio de 2010.)