Ruanda . kagame, el “capadocio”, por Antonio Molina

31/03/2011 | Bitácora africana

Enfundado en su traje negro o gris marengo, con chaqueta cruzada, que disimula su delgadez de espagueti y su longitud de poste de la luz. Es la imagen más actual de Mefistófeles. El diablo encarnado, sólo le faltan los “cuernos” y el rabo.
El tirano de Ruanda siempre nos sorprenderá con sus sutilezas, producto de una mente “genocidiaria” muy imaginativa.

Es evidente que Ruanda vive corseteada en la estrechez de sus montañas. Sus
26.338 kms 2 de superficie, están empinados en las laderas de las montañas.
Éste debería ser el país de los campos en terrazas, pero aún así es poco terreno para su demografía galopante, que reclama controles y planificación de la población, que no puede o no debería pensar en invadir y penetrar masivamente en su inmenso y rico vecino, el Congo.

En este estado de la cuestión, se le ocurre a este Herodes del siglo XXI, no la matanza de los inocentes, sino una “sanatio in radice” : la vasectomía de los hombres en edad de procrear: la medida va a afectar a 700.000 varones comprendidos entre los 25 y los 50 años. La propaganda oficial del gobierno proclama que es una operación voluntaria y gratuita. Ya sabemos lo que significan estos vocablos en boca del dictador Kagame.

Si echamos unas sencillas cuentas, podemos calcular que si cada uno de estos hombres engendrara una media de 5 hijos en diez años, la población aumentaría 3 millones y medio de personas. Si calculamos por otro lado el número de defunciones de ancianos, enfermos, encarcelados, miembros de la oposición y la mortalidad infantil, sin ser especialistas en proyecciones “poblacionales” , ni videntes adivinos, podemos pensar que Ruanda crecería muy poco en esta década, rondando los 10 millones largos, que ya posee.

Nosotros nos preguntamos: Esos 700.000 varones ¿serán proporcionalmente representativos de las dos etnias principales: Hutus 84% y Tutsis 14%? De eso resultaría 602 mil hutus y 98 mil tutsis “castrados” o para emplear un eufemismo “vasectomizados”. Pero, como según la propaganda oficial, para el régimen de Kagame sólo existen ruandeses sin apellido étnico, mucho nos tememos que las pinzas o las tenazas del veterinario “capador” sólo acaricien los conductos seminales de los Hutus.
Todo se andará, para que en el siglo XXII , los HUTUS, que son los “bajutus” hayan disminuido hasta el 50% y los TUTSIS, que son los “altusis” hayan crecido hasta el 50%… o, si Dios no lo remedia, algo más.
Evidentemente, todo esto contando con que el diablo consiga larga vida para su hijo predilecto, el presidente Paul Kagame, que pasará a la Historia con el mote de “El CAPADOCIO”.

Autor

  • Molina Molina, Antonio José

    Antonio José Molina Molina nació en Murcia en 1932. Desde 1955 es Misionero de África, Padre Blanco, y ya desde antes ha estado trabajando en, por y para África. Apasionado de la radio, como él relata en sus crónicas desde sus primeros pasos en el continente africano, "siempre tuve una radio pequeña en mi mochila para escuchar las noticias". Durante septiembre 2002, regresa a Madrid como colaborador del CIDAF. En octubre de 2005 aceptó los cargos de secretario general de la Fundación Sur y director de su departamento África. Antonio Molina pertenece -como él mismo dice- a la "brigada volante de los Misioneros de África", siempre con la maleta preparada... mientras el cuerpo aguante.

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