El gobierno de Namibia ha negociado con Areva, la compañía francesa de energía nuclear, para cumplir su sueño de tener energía nuclear: ha ofrecido incentivos fiscales para el proyecto Trekkopje de la compañía estatal francesa, a cambio de un estudio de viabilidad sobre la generación de energía nuclear en Namibia.
Trekkopje recibió su licencia de Zona de Procesamiento y Exportación, EPZ, en 2010, para un periodo de cinco años, después de que Areva supuestamente acordase analizar las posibilidades de tener energía nuclear en Namibia.
Hilifa Mbako, director nacional de Areva Resources Namibia, no confirmó el día 8 de febrero la implicación directa de Areva en los planes de energía nuclear del gobierno de Namibia. Dijo que existe un diálogo bilateral entre los gobiernos de Namibia y Francia. Sin embargo, declaró que Areva “ayudará encantada” si surge la posibilidad nuclear.
Con esta información se entiende que las ambiciones nucleares de Namibia cuentan con el apoyo total del presidente Hifikepunye Pohamba.
Namibia, el cuarto país mayor productor de uranio del mundo, empezó a estudiar la idea de generar su propia energía nuclear en 2008. Entonces se fijó como objetivo 2018.
Más recientemente, el gobierno ha estado hablando ya de 2025 o 2027, para la puesta en marcha del proyecto, que tendrá un coste estimado de 17.000 millones de dólares namibios [100 dólares namibios equivalen a 10 €].
JO-MARÉ DUDDY
(The Namibian, 09-02-12)
