El presidente congoleño, Joseph Kabila dejará el poder el próximo año después de su segundo mandato, según comunicó, el portavoz del gobierno, Lambert Mende, el 5 de febrero.
«El presidente Kabila no permanecerá en el poder al final de su mandato en 2016. La República Democrática del Congo no regresará a la guerra civil», esto es lo que ha declarado el Sr. Mende en una conferencia de prensa en Kinshasa.
El anuncio se produce dos semanas después de los violentos disturbios ocurridos en Kinshasa. El resultado de estas protestas en contra de la adopción de una ley electoral allanando el camino para un aplazamiento de las elecciones presidenciales de 2016 fue muy dramático: 13 muertos, según el gobierno, y alrededor de cuarenta de acuerdo con la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) y la Human Rights Watch (HRW).
Bajo la presión de la calle, el Parlamento de la República Democrática del Congo acabó aprobando, finalmente, el 25 de enero, una nueva ley electoral sin la cláusula polémica que condicionaba la celebración de unas nuevas elecciones presidenciales a la realización de un nuevo censo de población. La retirada de la esta propuesta de ley ha sido acogida, como una victoria, por los opositores, que vieron en esta propuesta una maniobra para permitir que el presidente Joseph Kabila permaneciera en el poder más allá de 2016, cuando la Constitución le prohíbe expresamente intentar una reelección el año que viene.
Joseph Kabila asumió la presidencia en 2001, después del asesinato del ex presidente, su padre Laurent-Désiré Kabila, durante la Segunda Guerra del Congo, antes de ser elegido en 2006. En 2011, volvió a ganar las elecciones presidenciales y los resultados fueron fuertemente impugnados por la oposición.
[Fuente: cameroonvoice.com-Fundación Sur]