El último habitante congolés que estaba recibiendo atención médica para combatir el ébola ha sido dado de alta en la provincia de Kasai, según la agencia sanitaria de las Naciones Unidas. Este sería el décimonoveno en recuperarse después de que “el brote fuese declarado en septiembre”, según ha informado la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Si en los próximos 42 días no surge ningún otro caso, el Congo podrá declararse libre de ébola. El director de la OMS en África, Mohamed Yakub Janabi ha declarado que “la robusta respuesta del país, con el apoyo de la OMS y sus socios, ha sido fundamental para este logro”. Este brote comenzó en Bulape y Mweka, zonas de Kasai al suroeste del Congo, en aldeas cuyo acceso era difícil para que hubiese una respuesta exitosa rápidamente, aunque al mismo tiempo contuvo la enfermedad.
Sin embargo, el brote ha sido controlado en un corto periodo de tiempo, y si todo continúa así, el país será libre de ébola en las próximas semanas. La OMS consiguió crear un centro “fuera de la simulación del ejercicio” en la región de Bulape, el ritmo de contagio se está ralentizando gracias a la “mejoría en la vigilancia, gestión de casos y control de infecciones” en la zona.
[CIDAF – UCM]