¡Qué sarta de mentiras!
La realidad es que Etiopía ocupa el puesto 132º (de un total de 189 economías) en el informe del Banco Mundial de 2015. En 2014, Etiopía ocupaba el puesto 129 (un poco «mejor» que en 2015).
En la categoría «Starting a Businness», Etiopía ocupa en 2015 el puesto 168 de 189 economías. En 2014, Etiopía ocupaba en esta misma categoría el puesto 165/189 (un poco «mejor» que en 2015).
Sin tener en cuenta esta realidad, estos periodistas extranjeros, vergonzosamente ignorantes, perezosamente y sin pensar siguen repitiendo como un loro la sarta de mentiras que les suministran el T-TPLF y los proxenetas internacionales de la pobreza sobre el crecimiento económico de Etiopía y la inversión.
Estos periodistas extranjeros son tan poco juiciosos que ni siquiera se preguntan cómo una de las «economía de más rápido crecimiento del mundo» no es capaz de alimentar a una población cuyo 10 por ciento (10 millones) se enfrenta a la hambruna.
Esta manera de informar de los periodistas extranjeros sobre Etiopía es «periodismo amarillo». Lo que es difícil de creer hoy en día es el hecho de que los periodistas extranjeros tragan el anzuelo, la tanza y el plomo del bulo sobre que El Niño es el causante de la actual hambruna en Etiopía.
Estos llamados periodistas han elegido ser voluntariamente ignorantes del hecho de que en los últimos 15 años, ha habido por lo menos 3 fenómenos «El Niño», pero ninguno de ellos ha producido en Etiopía hambruna en la escala que vemos ahora, afectando a cerca de 9 millones de personas.
De hecho, el fenómeno el Niño 1997-98 fue clasificado como el segundo más grave desde 1950 «Muy Fuerte» (máxima calificación) pero no hubo hambruna bíblica del tipo que vemos hoy en Etiopía.
Según la ONU, el número de víctimas de la hambruna en Etiopía podría duplicarse para el año que viene hasta «15 millones de personas necesitarán asistencia alimentaria, más que en el interior de Siria devastado por la guerra».
El informe añade: «Sin una respuesta contundente apoyada por la comunidad internacional, hay una alta probabilidad de una inseguridad alimentaria significativa y un desastre nutricional».
El TPLF y sus donantes occidentales y prestamistas piensan que son tan inteligentes que puedan convencer al mundo de que el pueblo etíope está dándose un banquete cuando agonizan de hambre.
Hace unas semanas, un ignorante payaso del TPLF «ministro de GCAO» llamado Redwan Hussien, reconoció que existe una crisis alimentaria seria en el país, pero desestimó la necesidad de asistencia alimentaria internacional.
Redwan dice que Etiopía no necesita la asistencia internacional. Sin embargo, el «Gobierno» de Etiopía dice que necesita ayuda para alimentar a 8,2 millones de personas amenazadas por la hambruna.
Los informadores del TPLF ni siquiera pueden ponerse de acuerdo en sus historias.
Redwan dijo también: «Estamos en condiciones de alimentarnos nosotros mismos y, por tanto, la magnitud del problema no ha sido sentida por la mayoría del pueblo incluso en las zonas afectadas por la escasez de lluvia».
¿Así que 8,2 millones de etíopes están de fiesta?
¿Es este tipo Redwan ignorante o está jugando con las vidas de millones de Etíopes?
Tal vez es sólo menos sensible que una caja de piedras.
Según Redwan, la gente hambrienta de Etiopía no sabe que están muriendo de hambre.
Así que la verdadera pregunta es: ¿Puede gente como Redwan (y él es probablemente la crème de la crème del TPLF) salvar de la hambruna a 8,2 millones de etíopes?
En septiembre de 2010, el fallecido Meles Zenawi, maestro de Redwan (el cerebro en el TPLF) declaró pomposamente: «Tenemos ideado un plan que nos permitirá producir excedentes y poder alimentarnos a nosotros mismos para el año 2015 sin necesidad de ayuda alimentaria”.
En septiembre de 2015, Etiopía se enfrenta a una hambruna bíblica.
Los rufianes del TPLF se engañan a sí mismos en la creencia de que pueden engañar a todo el mundo todo el tiempo con sus idiotas proclamas de «un crecimiento de dos dígitos», «imán de inversión» y el resto de la basura que bombean.
Creen que nadie va a comprobar lo que dicen.
(Para ser justos, ¿cuántos letrados etíopes, periodistas, analistas, etc., controlan al TPLF para mantenerlos honestos?)
Bueno, la verdad debe ser dicha. Lo que es bueno para la gansa es bueno para el ganso.
Al igual que los del TPLF son mentirosos de nacimiento, la oposición parece estar intelectualmente paralizada y con encefalograma plano.
Lo peor está por venir
En 2011, la Oficina del Censo de Estados Unidos hizo la predicción aterradora de que la población de Etiopía se triplicaría en 2050 hasta los 278 millones. Para 2025, informa que la población de Etiopia contará con 131 millones de personas.
Etiopía no puede alimentar a 99 millones de personas hoy en día.
No pudo alimentar a 87 millones en 2010.
No pudo alimentar a 78 millones de personas en 2006.
¿Cómo diablos podrá Etiopía alimentar a 131 millones de personas en el año 2025?
Etiopía se dirige a toda velocidad en dirección a una «catástrofe malthusiana» (donde la enfermedad, el hambre, la guerra, etc. reducirá la población al nivel de la producción de alimentos) en el futuro previsible.
La hambruna en Etiopía no es causada por «El Niño», «La Niña» o «El Chapo». No es efecto de la sequía. ¡Es producida por la MALA GOBERNANZA!
Alemayehu G. Mariam
Tesfanews
* Alemayehu G. Mariam es profesor de Ciencias Políticas en la Universidad Estatal de California y abogado ejerciendo en Los Ángeles.
@pal4thedefense
[Traducción Jesús Esteibarlanda]
[Fundación Sur]
