Cientos de niñas, algunas con apenas 10 años, son obligadas a prostituirse en el distrito de Buikwe, en Uganda. Según demuestra un estudio de reciente publicación realizado por un organismo académico del país. Entre las principales causas que alimentan esta lacra están las altas tasas de abandono familiar.
El estudio, titulado «Estudio de los mecanismos de protección de la infancia basados en una comunidad pesquera en el centro de Uganda», realizado por AfriChild, un centro de investigación sobre la infancia de la Universidad de Makerere, revela que la prostitución infantil es el segundo riesgo más grave al que se enfrenan los niños de Buikwe superado sólo por el trabajo infantil.
Aunque en la zona también abundan prostitutas de más edad, los clientes prefieren a las niñas porque son más baratas. Mientras que tener sexo con una adulta cuesta algo más de un dólar americano, los «servicios» de una niña no llegan a los cincuenta centavos.
Cuando se hace de noche, narra el informe, «las niñas, vestidas con minifalda, se pasean por discotecas, bares, casas de campo y salas de cine para que los hombres las compren. Los chichos también son obligados a prostituirse».
Joyce Wanican, directora ejecutiva de AfriCenter, atribuye el aumento de niños involucrados en la prostitución infantil a la negligencia de los progenitores. «Muchas familias dejan a los niños solos por largos periodos de tiempo, lo que les hace vulnerables a este tipo de explotación», denuncia Wanican.
Acerca del estudio
El estudio, que se realizó para guiar a los programas y políticas que tienen como objetivo mejorar el bienestar de los niños, contó con 152 participantes entre adultos y menores.
Uno de los ancianos de la comunidad, que aparece citado en el texto, asegura que hay un lugar llamado «Strong Pub», donde los niños pueden ir a ver películas y al karaoke, en el que «hay un niño de 10 años entreteniendo a la multitud y a nadie parece preocuparle»
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) define la prostitución infantil como el uso de niñas y niños en actividades sexuales remuneradas, ya sea en efectivo o en especie. Según datos aportados por OIT, actualmente hay entre 7.000 y 12.000 que ejercen la prostitución tan solo en Uganda.
Si bien el gobierno ugandés elaboró, a través del Ministerio de Desarrollo de Género desarrolló un Plan de Acción Nacional para eliminar esta forma de explotación infantil en Uganda, en el que prohibía expresamente la participación de menores en la explotación del comercio sexual, el problema no presenta vistas de mejora.
Fuente: Daily Monitor
[Traducción y edición, Sarai de la Mata]
[Fundación Sur]
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