El primer ministro de Libia, Abdul Hamid Dbeibah, reconoció la prolongada negligencia en el mantenimiento de las dos presas que reventaron recientemente, causando inundaciones devastadoras y más de 5.000 muertos. Estas presas, construidas en la década de 1970 a las afueras de Derna, tenían contratos y acuerdos de mantenimiento que nunca se utilizaron, según revelan documentos del gobierno. Dbeibah aceptó la responsabilidad compartida entre los libios, pero subrayó su responsabilidad primordial como dirigente en la gestión y supervisión de las presas.
Libia sigue dividida entre los gobiernos rivales del este y el oeste, pero la catástrofe de las inundaciones supuso un momento de unidad, ya que los organismos gubernamentales de todo el país se apresuraron a ayudar a las zonas afectadas, con 5.500 muertos confirmados y 9.000 personas aún desaparecidas.
Fuente: Africa News
[Traducción y edición, Loreto Acosta]
[CIDAF-UCM]
0 comentarios