La cuestión de la deuda no es una trampa tejida por China al dar sus préstamos. Como dijo el presidente Kagame, el resultado «depende de nosotros, los africanos». El factor clave que determina el éxito de los préstamos chinos a África es cómo los gobiernos africanos utilizan dichos préstamos para la inversión de capital productivo. Para que estas inversiones tengan éxito, los gobiernos africanos deben rendir cuentas con sus pueblos. Esto no es responsabilidad de China, más bien, son los africanos los responsables de garantizar la rendición de cuentas.
Hay diferentes razones obvias que convierten a China en el socio preferido para África. Para los africanos, China tiene cuatro atracciones principales: 1. Préstamos blandos y fácil acceso a capital; 2. Rápido envío de servicios y bienes baratos; 3. Financiación del mantenimiento de la paz; y 4. Un modelo alternativo de desarrollo.
– 1. En primer lugar, la cooperación incondicional de China ha permitido a los gobiernos africanos disfrutar de acceso a financiación, experiencia y ayuda para el desarrollo. En 2016, el comercio entre China y África alcanzó los 128 mil millones, de dólares. un aumento drástico con respecto a los 1 mil millones de dólares en 1980. En el FOCAC, China ofreció 60 mil millones de dólares para desarrollo financiero hasta 2021. Si bien las crisis financieras en los EE. UU. y la UE limitaron sus inversiones en África, China se comprometió a invertir más en el continente. Los préstamos blandos de China han permitido a muchos gobiernos africanos evitar presiones por parte de instituciones globales como el FMI y el Banco Mundial para cumplir con las obligaciones occidentales de reformas políticas y económicas.
– 2. En segundo lugar, China ha ayudado a los gobiernos africanos a atender más rápidamente las demandas de su población en cuanto a servicios e infraestructuras. Mucha gente en África está acostumbrada al rápido envío de servicios (como transporte, educación, salud y telecomunicaciones) por compañías chinas. Esto ha generado, y seguirá generando, más apetito para los negocios chinos en África.
– 3. En tercer lugar, China está actualmente comprometida con la paz y proyectos de seguridad en África. Las tropas chinas participan en ocho misiones de la ONU para el mantenimiento de la paz, de las cuales cinco están en África. Asimismo, China es el segundo máximo contribuyente financiero a dichas misiones de paz de la ONU, y también contribuye en la financiación de la AMISOM (Misión de la Unión Africana en Somalia) y en la mediación de IGAD (Autoridad Intergubernamental sobre el Desarrollo de África Oriental) en Sudán del Sur.
– 4. En cuarto y último lugar, la historia de crecimiento económico rápido y exitoso de China es un modelo del cual se pueden aprender muchas lecciones en África. Según el Banco Mundial, en unos 40 años China ha sacado a unos 800 millones de personas de la pobreza a través de un poco convencional camino de desarrollo. Cabe destacar que ha logrado muchos de los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
Los africanos deben tomar nota de China en cuestiones de desarrollo y soberanía. Pueden mantener su hogar en orden así como extraer lo mejor de la competencia entre grandes potencias y actores regionales, ya sean de Occidente, Medio o Lejano Oriente. Tal como están las cosas, China se está empezando a ganar los corazones, y las mentes, de los africanos. Occidente tendrá que cambiar su tacto si quiere ponerse al día.
Mehari Taddele Maru
*Mehari Taddele Maru es un experto en temas de paz y seguridad, leyes y gobernanza, y derechos humanos y migración
Fuente: African Daily Voice
[Traducción y edición, Javier Ramos López]
[Fundación Sur]
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