La multinacional farmacéutica Pfizer INC y Nigeria están dispuestos a alcanzar un acuerdo fuera de los tribunales, por las pruebas médicas realizadas en 1996, por las cuales Nigeria asegura que murieron 11 niños y docenas de ellos quedaron minusválidos.
El Gobierno Federal de Nigeria y el del estado norteño de Kano demandaron a Pfizer hace más de un año, pidiendo un total de 8.500 millones de dólares por los daños causados con las pruebas de un antibiótico llamado Trován, en Kano, durante la epidemia de meningitis de 1996, que mató a 12.000 niños.
El caso civil y criminal que lanzaron las autoridades de Nigeria se ha ido convirtiendo en un enredo difícil de resolver. Pfizer niega todos los cargos, y las autoridades de Nigeria aseguran que la farmacéutica no obtuvo las aprobaciones oficiales estipuladas por la ley además de haber engañado a los padres de los 200 niños, con los que se llevaron a cabo las pruebas.
Pfizer argumenta que los 11 niños murieron por la meningitis y no por su nuevo medicamento en pruebas, al igual que los que quedaron inválidos o afectados de diversas maneras. Añaden que el Trován no sólo no es responsable de las muertes sino que salvó la vida de otros.
Las conversaciones entre el Estado de Kano y Pfizer sobre un posible acuerdo comenzaron en diciembre de 2007 y se retoman ahora. Fuentes judiciales aseguran que Pfizer propuso en marzo una reunión para pagar 10 millones de dólares en compensación, comprometerse a rehabilitar el hospital donde se llevaron a cabo las pruebas con Trovan y modernizar la compañía manufacturera de medicamentos, perteneciente al Estado de Kano.
(IOL, 20-06-08)