El líder del breve golpe de estado en Burkina FASO, el general Gilbert Diendéré, es un aliado cercano del expresidente Comparé, quien fue derrocado por un levantamiento popular el pasado mes de octubre. Además, Diendéré también es un secuaz occidental con conexiones en Francia y EE.UU., los dos poderes que a lo largo de los años han frustrado las luchas de la población de Burkinesa por una autodeterminación significativa.
Una situación política que cambia constantemente se ha venido desarrollando en el estado de África occidental de Burkina Faso después de que una unidad de élite militar tomara el poder el pasado 17 setiembre, apenas unas semanas antes de una elección nacional prevista para el 11 de octubre.
Antes de la declaración del golpe militar, el presidente provisional Michel Kafando y el Primer ministro Isaac Zida fueron puestos bajo arresto domiciliario. El presidente interino fue puesto en libertad después de varios días mientras las protestas estallaron sobre el intento de detener las cercanas elecciones.
El anterior jefe de la división de Inteligencia del Regimiento de Seguridad Presidencial (RSP), el general Gilbert Diendéré, fue puesto a cargo del régimen golpista que se autodenominaba el Consejo Nacional para la Democracia. Diendéré fue un cercano colaborador del exlíder, Blaise Comparé, quien derrocó y asesinó al jefe de estado, el capitán panafricanista y socialista Thomas Sankara, después de que él gobernase la antigua colonia francesa subdesarrollada durante 1983 a 1987.
A finales de octubre del 2014, cientos de miles de trabajadores y jóvenes irrumpieron en el parlamento en la capital de Burkina, Uagadugú, para derrocar al dictador militar convertido en político, Blaise Comparé, un firme aliado de Francia y de los Estados Unidos. Comparé huyó a la vecina Costa de Marfil mientras se estableció un gobierno provisional comprometido para preparar las elecciones supervisadas internacionalmente para octubre de 2015.
Un equipo de mediadores desplegado en Burkina Faso por la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) anunció el 20 septiembre se había logrado un acuerdo mutuo para resolver la crisis. El presidente Senegalés Macky Sall anunció que Diendéré renunciaría a cambio de la participación de Comparé en las elecciones de octubre.
También el RSP exigía una declaración de amnistía que impidiese cualquier intento futuro de procesarlos por los crímenes contra la población de Burkina Faso. A lo largo del golpe más reciente, 10 personas murieron y más de 100 resultaron heridas.
Sin embargo, Diendéré no estaba presente en la conferencia de prensa donde se presentó a los medios de comunicación el acuerdo negociado del equipo de mediación de la CEDEAO. La especulación de que los líderes del RSP buscarían aferrarse al poder, incitó una marcha sobre la capital de las fuerzas militares respaldadas por las organizaciones políticas opuestas al golpe.
Posteriormente, el 20 de septiembre, Diendéré dijo que permanecería en el poder hasta después de que las elecciones se llevaran a término. Esta declaración accionó a las fuerzas de la oposición que expresaron su determinación para atacar a los líderes del golpe en la capital.
Los dirigentes de organizaciones de masas levantaron barricadas alrededor de Uagadugú después de la proclamación realizada por Diendéré. Serge Bambara (Smockey), el líder de la organización Balai Citoyen, escribió en su página de facebook: “¡Nuestro país nos llama camaradas! Nosotros debemos paralizar a Uagadugú sea como sea”.
Los informes dijeron que los elementos golpistas liderados por el RSP intentaron atacar el hotel donde se estaban celebrando las conversaciones para resolver la crisis. Otros elementos militares dentro del ejército más amplio se volvieron impacientes reconociendo la posibilidad de que se produjera agitación.
Los miembros de Balai Citoyen, implicados en la mediación, se encontraban entre los atacados por los soldados de la guardia presidencial camuflados quienes irrumpieron temprano en el hotel Leico el 20 de setiembre, mientras agitaban rifles de asalto, pistolas y escopetas.
Sin embargo, la British Broadcasting Corporation (BBC) informó el 21 de setiembre que Diendéré había dicho que el renunciaría al poder después de todo. Los rumores que circularon fueron que el líder del golpe estaba escondiéndose.
El Servicio Mundial de la BBC publicó en su sitio web que “el líder del golpe en Burkina Faso ha dicho que está dispuesto a entregar el poder a las autoridades civiles de transición, mientras el ejército marcha a la capital. El general Gilbert Diendéré, quien encabezó el golpe del pasado jueves (17 de setiembre) junto a la guardia presidencial, también ofreció disculpas a la nación. Anteriormente el ejército dijo que las tropas se dirigían a Uagadugú, y añadió que los conspiradores debían deponer las armas.”
ANTECEDENDENTES DE LA ACTUAL CRISIS
Esta toma militar del poder dirigido por el RSP en Uagadugú evidentemente se llevó a cabo para detener las elecciones nacionales programadas -para el 11 de octubre. En las últimas semanas, las autoridades provisionales acordaron disolver el RSP después de la instauración de un nuevo gobierno, el cual surgiría del proceso electoral.
Las condiciones para las elecciones y el gobierno provisional nunca se habrían aplicado sin la rebelión en masa de octubre de 2014 que derrocó el anterior régimen militar vestido de civil dirigido por Comparé. En el transcurso de los disturbios que creó las condiciones para la expulsión de Comparé, miles de jóvenes usaron camisas y llevaron pancartas con la imagen de Sankara, que evoca el periodo revolucionario anti-imperialista de mediados de los años ochenta.
Con el paso de los días se comenzó a mostrar una honda preocupación sobre la eficacia del equipo de medicación de la CEDEAO no conseguía superar la crisis. Posteriormente, la Unión Africana (UA) impuso sanciones a los líderes del golpe. En teoría, la Unión Africana rechaza toda toma antidemocrática de poder en todo el continente y tiene el mandato de trabajar para lograr la restauración del gobierno civil. En respuesta a la protesta nacional e internacional, se anunció que el 18 de septiembre, el presidente provisional había sido puesto en libertad.
Burkina Faso, una antigua colonia francesa, ha sido una base de las operaciones militares y de inteligencia coordinadas por Paris y Washington. Un estado productor de oro, ha seguido siendo uno de los países más pobres de África y del mundo. Diendéré trabajó estrechamente con el Pentágono norteamericano en la maniobras de defensa recientes conocidas como Operación Flintlock. Burkina Faso ha servido como un centro de Comando militar estadounidense en África (AFRICOM) también llamado operaciones “antiterrorismo” en el África occidental.
Rinaldo Depagne, el director del proyecto de África Occidental para International Crisis Group, describió a Diendéré como el “J. Edgar Hoover” de Burkina Faso; diciendo que el líder del golpe era un máster de inteligencia, información, organización y control.
Según la agencia de prensa Reuters, “Durante el último decenio, las amplias conexiones regionales de Diendéré ayudaron a Comparé a transformarse de paria internacional a pacificador regional y un aliado clave en la batalla de Occidente contra los militantes islamistas. “A los oficiales del ejército, tanto franceses como estadounidenses, les gustaba (Diendéré)”, dijo Depagne. “Era muy fácil trabajar con él y estaba muy bien informado, no solo en Burkina sino en todo el África Occidental y especialmente en la región del Sahel.” (17 de septiembre)
Este mismo artículo sigue observando que “Las tropas franceses entrenaron con el RSP de Compaoré, la fuerte unidad de elite de 1300 soldados que fue un pilar clave de su gobierno y sobre el que Diendéré ejercía el mando de facto. El general participó en negociaciones delicadas con grupos vinculados a Al Qaeda, apareciendo en frente de las cámaras de televisión con rehenes europeos liberados.”
A pesar del derrocamiento de Comparé en Octubre del 2014 y la relación difícil con el gobierno transicional que tomó el mando después del derrocado líder, Diendéré siguió participando en operaciones “contra el terrorismo” en Chad.
Francia y los EE.UU. han mantenido una posición oficial de estar en contra del golpe aunque ellos han trabajado estrechamente con su líder en los últimos años. AFRICOM, bajo la administración de Obama, busca establecer asociaciones con estados africanos y sus fuerzas militares en un esfuerzo por minimizar el número de tropas de EE.UU. sobre el terreno en la región. Sin embargo, la administración ha prometido desplegar más de 3500 soldados en toda África. Un ejemplo de esta colaboración entre AFRICOM y los regímenes dominados por el imperialismo en el continente es el proyecto actual que está construyendo una valla en la frontera entre Nigeria y Níger
Abayomi Azikiwe (Editor de Pan-African News Wire)
Pambazuka
[Traducción, Liz Mariela Márquez Muñoz]
