¿Para cuándo el fin de la vergüenza en el Mediterráneo?

25/06/2018 | Opinión

Señores dirigentes del Mundo: Echad un vistazo más sereno y mucho más atento al que está pasando en el Mediterráneo y encuentren una dinámica más seria y definitivamente eficaz, que ponga fin a todo lo que hemos asistido hasta ahora, con este desfile de náufragos de un lado y de cumbre tras cumbre, muy bonitas en imágenes de las televisiones, pero con resultados que dejan mucho que desear.

aquarius-ext.jpgEn el pasado domingo día 17 de junio de 2018 atracaron en el puerto de Valencia (España), los tres navíos que transportaban los cerca de 700 seres humanos que, rescatados de naufragios, una vez más han encontrado en la hospitalidad de España, un pequeño rayo de esperanza no solo de vida, sino también de una vida más decente que sus países y otros les negaron. Gracias a esa buena voluntad y caridad del gobierno español que in extremis, se predispuso a darles cobijo, terminó de momento, el calvario de esa nueva avalancha de ciudadanos de varios países que, durante días deambularon inhóspitas aguas, donde dejaron muertos compañeros anónimos, sin que nadie quisiera darles acogida.

El triste espectáculo que se ha visto no ha sido único ni nuevo. Pero estoy seguro de que ha sido una vez más motivo para un sentimiento de vergüenza, pero también de revuelta, al menos para los que estén conscientes del problema.

Vergüenza, que me gustaría ver que empezara siendo sentida por los responsables directos e indirectos y que todo eso fuera a convertirse en motivo de esperanza de una luz en el fondo de este maldito túnel donde se encuentran jóvenes e incluso niños, esa gran riqueza que debería de ser la mayor inversión de nuestro Continente, pero actualmente abandonados a esa tragedia que parece interminable.

De los cerca de 700 desembarcados en Valencia, 123 eran menores que viajaban sin compañía. Por una infeliz coincidencia, en el mismo fin de semana, se estaba celebrando con pompa, el Día del Niño Africano.

También, en el mismo momento en que los tres navíos desembarcaban a esa cantidad de personas en Valencia, la frontera sur del mismo país acogedor, recibía en menos de 48 horas del mismo fin de semana 16/18 de junio, otros cerca de 1 300 náufragos, rescatados de embarcaciones de fortuna que llegan de una forma que…solo Dios lo sabe. Menudas veces desembarcan seres humanos de ambos sexos, mujeres embarazadas, hombres desfigurados al limite de la vida, pero también desembarcan cadáveres. ¡Qué vergüenza! ¿Su procedencia? Los mismos países de siempre y otros, mayoritariamente africanos. Observar, que en su mayoría estos nuestros hermanos desesperados, vienen de países más ricos que ciertos países de acogida. Entre ellos, jóvenes académicamente preparados, llenos de ilusión, que podrían dar una grande contribución al desarrollo de sus propios países que han sido forzados a abandonar.

Si tenemos en cuenta que la mayoría de los 54 países africanos ya está en el tercer cuarto de siglo de sus independencias; si consideramos la edad de la Unión Africana, debía de ser tiempo suficiente para que pudiéramos estar a la debida altura de solucionar los problemas que están en el génesis de ese vergonzoso movimiento migratorio. Pero, siéguense reuniones y más reuniones no solo de instituciones africanas sino europeas y otras, pero las avalanchas siguen de forma interminable.

De toda esta película, lo que da vergüenza es la insensibilidad de los verdaderos responsables. Hablase de las redes de las mafias, lo que considero una forma muy simplista y equivocada de ver el problema. Las mafias existen. Pero ellas solo están aprovechando una situación que les es favorable, creada por otros actores que considero como verdaderos responsables:

– 1.- Ciertos dirigentes de países del Sur, países que muchas veces desbordan de riquezas más que suficientes para dar una vida decente a sus hijos; egoístas, corruptos, dictadores que jamás han ganado una elección realmente libre y que pasan la vida espoliando a sus poblaciones y persiguiendo a jóvenes lucidos que van sobresaliendo, obligándoles a esos viajes hacia el desconocido. Muchos de esos líderes, prefieren emborracharse en el lujo de bienes públicos que roban de esas pobres personas que son los verdaderos dueños, sin que tengan el mínimo remordimiento cuando miran las duras imágenes de sus víctimas. Esos son los verdaderos culpables. Pero no están solos.

– 2.- Algunos de sus colegas del Norte también están en el mismo banquillo. Porque son los que siguen apoyando y alimentando a esos líderes. Algunos de ellos no quieren ni saber nada de los problemas que existen en aquellos países; prefieren alimentar y mantener políticas neocolonialistas; dividen, venden armas a los que oprimen a su pueblo y que violan los derechos humanos en sus países. Alimentan así sus industrias armamentistas, que elevan el nivel de vida en el Norte, pero exterminan pueblos en los países del Sur que solo interesan para los negocios. Cuántas veces no se escucharon en el Norte frases como: “pero, atención, porque tenemos muchas empresas nuestras en este país y necesitamos actuar con cuidado para no perjudicar las relaciones que tenemos y no dificultar la vida a nuestras empresas”. En seguida, surgen con unas medidas que dicen ser de apoyo al desarrollo, pero no quieren saber si tales apoyos van de hecho al desarrollo, o si van a terminar en manos de tales jefes irresponsables, que en cima utilizan los respectivos rendimientos para engordar sus cuentas personales domiciliadas en paraísos fiscales.

No es que uno esté en contra de las empresas incluyendo las que venden armas y otras cosas inútiles a las poblaciones. Hay veces que hasta las armas sirven para la protección de los ciudadanos. Pero, digo bien, “a veces”. También considero legítimo que uno se preocupe a proteger a sus ciudadanos y a sus relaciones diplomáticas etc., y puede uno decir (si tales dirigentes del Sur que reciben esas ayudas no saben o no quieren dar lo que es bueno a sus ciudadanos, es problema suyo). Pero, no está correcto. Y una cosa es cierta: – si se desea actuar con responsabilidad, sería necesario por lo menos que hubiera el cuidado de hacer estudios de seguimiento sobre cómo y adonde se termina lo que se vende con etiqueta o no, de apoyo al desarrollo a los llamados países amigos del Sur. Porque si, al final se realizan estos estudios y se llega a la conclusión de que las armas u otros productos que se venden no son para el bienestar de los pueblos, pero son utilizados por esos dictadores para la represión y persecución de sus ciudadanos lo que va a alimentar la miseria y la muerte acelerada en esos países, tal y como sucede a menudo, pero se sigue con dichos programas, entonces llegaremos a la conclusión que el Norte es cómplice y corresponsable de esa tragedia.

Por tanto acuso: acuso los del Sur, pero también acuso los del Norte, ambos carcomidos por la hipocresía, para la infelicidad de aquellos que, apretados por el sufrimiento y sin ninguna esperanza de una vida normal en la tierra de su nacimiento, prefieren lanzarse al mar de la incertidumbre y a la disposición de las famosas mafias en vez de quedar condenados a una muerte lenta en sus países. Es de esta situación y de esta forma que surgen los náufragos que hacen nuestro triste espectáculo actual, que alimenta el debate, con el endurecimiento del discurso xenófobo en ciertos sectores de la Europa actual.

Tal y como ya lo he dicho, las mafias solo se aprovechan de esa situación para hacer su sucio negocio, facilitado por los dirigentes de nuestro Mundo actual, incapaces de encontrar una solución duradera a este grave problema.

Que quede aquí un llamamiento para una reflexión profunda y seria, con el objetivo de encontrar una respuesta eficaz a esa pregunta de siempre para la salud de nuestro Mundo globalizado:

¿Hasta cuándo, África seguirá sangrando de esta forma?

Virgilio Samakuva

[Fundación Sur]


Artículos relacionados:

Movimientos migratorios en África Subsahariana en el contexto de derechos humanos y exclavitudes

Alemania propone devolver a los migrantes a África

La migración ilegal África-Europa

La realidad de la inmigración africana

Inmigración y seguridad temas centrales de la quinta cumbre UE-UA que se celebrará en Costa de Marfil

La «gran hipocresía» de Europa frente a la inmigración

Obama y Clinton han traido de vuelta la esclavitud a Libia

Libia se convierte en un infierno para los migrantes africanos

Libia es un epicentro de abuso de los menores emigrantes

Potencial acuerdo entre la UE y Libia en relación con los emigrantes

Emigrantes africanos asesinados en una playa de Libia

Guardacostas libios interceptan varias embarcaciones que transportaban 100 migrantes sudaneses

Historia de los afrodescendientes en Alemania

El Ministro del Interior de Gambia invita a la UE a abordar las causas fundamentales de la migración

“Que se combata el tráfico de seres humanos y la fuga de cerebros de África”: llamamiento conjunto de los obispos africanos y europeos

Indignación africana por subasta de inmigrantes en Libia

Autor

Más artículos de Administrador-Webmaster