La modestia de los derechos de transito acordados por Camerún vuelve a poner a la orden del día la renegociación del contrato.
En el segundo trimestre de 2012 el oleoducto entre Chad y Camerún aparentemente va a recibir petróleo de las nuevas explotaciones en activo de Chad, según el comité de pilotaje y el control de oleoductos, Cpsp, que anuncia esta novedad en su última publicación, se trata de producciones de las compañías China National Petroleum Company y Griffiths International. Teóricamente, el transporte de las nuevas cargas por el oleoducto entre Chad y Camerún deberían aumentar la cantidad de recogidas en la terminal de Kribi y, por tanto, aumentando los derechos de tránsito del petróleo chadiano acordado por el tesoro público camerunés.
De momento, remarca la última carta de Cpsp, estos cargamentos son de 462, desde la entrada en actividad del oleoducto entre Chad y Camerún, el 3 de octubre de 2003. 417 millones de barriles de petróleo se sacaron, con un total de ganancia de 171 millones de dólares, de los cuales casi 7.000 millones de francos FCFA ha sido en 2011. Pero bien mirado, la cantidad ganada por el tesoro público camerunés es ridícula. Según fuentes autorizadas y contables revelan que solo 3 años después del inicio del funcionamiento del oleoducto, los consorcios Exxon-Mobil, Petronas y Chevron-Texaco, habían ganado 2.300 billones de francos FCFA en este proyecto.
Esto, gracias al aumento del precio del petróleo en el mercado mundial. Desde 2006, el consorcio ha amortizado la inversión realizada rápidamente, los recursos obtenidos de la venta del petróleo chadiano por estas compañías petroleras se registran como ganancias, mientras que Camerún se contenta, en 8 años, con una ganancia de 85.500 millones de Francos FCfa solamente.
Con la intención de restablecer lo que entonces se llamaba “justicia económica”, Adolphe Moudiki, presidente del Cpsp y administrador director general de la sociedad nacional de Hidrocarburos, Snh, desveló en el trascurso de un ceremonia organizada en Duala, en 2009, la ambición del gobierno camerunés de renegociar el contrato de derechos de tránsito con Cotco, la sociedad que explota el oleoducto en nombre del consorcio antes mencionado. Con el fin de que, según precisó, “los beneficios de Camerún no sean más inversamente proporcionales” al aumento de los precios mundiales del petróleo, incluido el de Chad, que pasa a través del territorio camerunés.
Brice R. Mbodiam
(Mutations, Camerún, 03-02-12)
Traducido para Fundación Sur por Gloria Salanueva.
