Laurent Nkunda, el líder rebelde congoleño, ha amenazado con extender su ofensiva armada desde la región del este de la República Democrática del Congo, hasta la capital, Kinshasa, a menos que el Gobierno acceda a las negociaciones políticas con él.
“si se niegan a negociar, eso significará que deberán estar preparados sólo para luchar y nosotros les responderemos luchando, porque estamos luchando por nuestra libertad”, dijo Nkunda en una entrevista con la agencia de noticias Reuters, el pasado día 4 de noviembre.
El líder rebelde aseguró que su próxima ofensiva no se detendría en la capital provincial del Kivu Norte, Goma, sino que se dirigirá a Kinshasa, a más de 1.500 kilómetros al oeste.
El reportero de Al Jazeera, desde Goma, confirma el enfado del general renegado Laurent Nkunda con el gobierno del Congo R. D. por su negativa a negociar. “Los rebeldes aseguran que esto no es más que una invitación a seguir con el conflicto”, señala el reportero.
Nkunda ha pedido conversaciones directas con Kinshasa después de que las tropas del gobierno huyeran de la ciudad de Goma, ante la ofensiva de los rebeldes. Allí, los rebeldes han declarado un alto al fuego unilateral desde la pasada semana.
Desastre humanitario
El gobierno se negó a ceder ante las demandas de Nkunda alegnado que el diálogo debe ser entre todos los grupos armados que operan en la región. “No hay grupos ni grandes no pequeños”, aseguró Lambert Mende, portavoz del gobierno, “el acto de crear un desastre humanitario no da derechos especiales”.
Nkunda dice que lucha por la defensa de los derechos de la etnia tutsi en el este del Congo.
En Goma se esperaba la visita del primer ministro de Congo R. D., el día 3, como parte del tour por la región para “confortar a la población”. Adolphe Muzito, que ocupa su cargo desde el pasado 10 de octubre, también debería haber visitado Bukavu en el Kivu Sur, Kisangani y Dugu.
Cerca de 850 soldados de la fuerza de la ONU en el país, MONUC, están apostados entre el grupo de Nkunda y la ciudad de Goma.
Refuerzo de la ONU
El ministro de Exteriores del Congo R. D, Alexis Tambwe Muamba, ha pedido al consejo de seguridad de la ONU que “redefina” la misión de paz del país para permitir que lleven a cabo operaciones “más contundentes” contra los rebeldes.
Bernard Kouchner, el ministro de Exteriores francés, que realizó una gira por el Congo durante el pasado fin de semana, durante la cual se reunió con los líderes regionales, también dijo que es necesario que los 17.000 soldados de la misión tengan unas reglas de compromiso más estrictas y tropas adicionales. “Hay brigadas enteras que no pueden emprender acciones defensivas, cuanto menos ofensivas, porque sus reglas de compromiso son insuficientes o porque son muy restrictivas”, señaló.
Se espera que un convoy de ayuda alimentaria haga llegar alimentos a algunas de las cientos de miles de personas atrapadas en los territorios tomados por los rebeldes, al norte de Goma. “Se cree que cerca de 250.000 personas se han visto desplazadas en los últimos meses, aumentando la cifra de desplazados internos en el Congo a cerca de 1 millón de personas, el 20 % de la población total del Kivu Norte”, asegura la agencia de la ONU para la infancia, en un comunicado.
Un convoy de 12 vehículos llegó el pasado día 3 de noviembre al campo de Kibati, donde se cree que al menos hay 50.000 personas escondidas en la selva, proporcionando jabón y bidones de plástico para recoger agua, en un intento de prevenir posibles brotes de cólera, esto causó enfado entre los refugiados que esperaban que la ayuda fueran alimentos.
“Todo el mundo está enfadado, todo el mundo”, afirma un profesor de 25 años, que asegura que ha estado sobreviviendo los últimos días comiendo bananas silvestres. Los oficiales de la ONU admiten que existen serios problemas de hambre en Kibati, pero añade que su prioridad era proporcionar los equipos de las clínicas, saqueados por las tropas del gobierno cuando se retiraban de la zona.
Obasanjo enviado especial de la ONU
En Nueva York, Ban Ki Moon, el secretario general de la ONU, ha nombrado a Olusegun Obasanjo, antiguo presidente de Nigeria, como su enviado especial para calmar la crisis.
Ban también declaró que estaba preparando un viaje él mismo a la región, para reunirse con Joseph Kabila, el presidente de Congo R. D., y con Paul Kagame, presidente de Ruanda.
“No puede haber una solución militar a la crisis del este del Congo, Nuestros esfuerzos deben centrarse en una negociación política”, declaró Moon.
(Al Jazeera, 05-11-08)
