El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha anunciado que recuperará el dinero robado a los africanos que sus líderes corruptos mantienen escondido en América y Occidente.
El anuncio se hizo en un mensaje especial leído en su nombre por el Fiscal General de Estados Unidos, Eric Holder, en el resort de Kampala, capital de Uganda, donde se reúnen estos días los jefes de estado y gobierno africanos.
Holder es parte de la delegación americana en la cumbre de Kampala, presidida por el máximo diplomático estadounidense en África, Johnnie Carson.
En un variado discurso que tocó el tema de los ataques terroristas y la ayuda de América a Uganda, el señor Holder, el primer negro que ocupa este cargo, habló de la espinosa cuestión de la corrupción. “El plan de recuperación de la a cleptocracia” se va a dirigir contra la corrupción a gran escala, ejercida por extranjeros. “He reunido a un equipo de fiscales (para abordar exclusivamente este tema)”, dijo. Según él, Estados Unidos también está dispuesto a apoyar el desarrollo de los poderes judiciales en África, para que combatan la corrupción”.
La cooperación internacional en cuanto al dinero que sale de las arcas nacionales para entrar en paraísos fiscales y bancos occidentales, siempre ha sido un tema muy debatido.
Naciones Unidas, en 2005, inauguró la Convención Contra la Corrupción, que pretendía forjar una amplia red contra la criminalidad transfronteriza.
El anuncio del día 25 en Kampala, además de la promesa central en materia de seguridad, la cooperación contra el terrorismo, podría ser interpretado como un intento de Obama de permanecer centrado en asuntos de gobierno, a pesar de los intereses más pronunciados de Washington de combatir el terror transfronterizo.
Muchos líderes africanos, algunos de los cuales estaban presentes durante este discurso, han sido acusados desde hace mucho tiempo de dilapidar verdaderas fortunas personales robadas al estado de manera extravagante, a expensas de la población de sus países.
El presidente de Gabón, Ali Ben Bongo Ondimba, cuyo padre Omar Bongo ha sido hasta hace poco el líder que más tiempo permaneció en el gobierno, causó indignación cuando pocos meses después de sustituir a su padre en la presidencia, se compró una casa en París de 85 millones de dólares.
El día 25 de julio, Holder, sin embargo, prometió más apoyo a la misión de paz de la Unión Africana en Somalia, afirmando que América estaba obligada “no sólo por la amistad y por ser socios, sino por las pérdidas de estadounidenses en los ataques terroristas del pasado 11 de julio.
(Daily Nation, Kenia, 26-07-10)