El Consejo de Ministros de Madagascar informó que desde el comienzo del año se han reportado 144 casos de violación, la mayoría de ellos involucrando a menores. La ley que busca castrar a los violadores de niños, vista como un medio disuasorio, aún está en espera de ser revisada por su constitucionalidad.
Andry Rajoelina, presidente de la República, expresó su indignación por el aumento de violaciones, especialmente contra menores, durante una reunión del Consejo de Ministros. Se espera que las nuevas disposiciones del Código Penal, que endurecen las penas para violadores de niños, entren en vigor una vez sean aprobadas por el Alto Tribunal Constitucional (HCC). Estas enmiendas incluyen la castración quirúrgica para los violadores de niños menores de 10 años, así como medidas similares para otros grupos de edad. La ministra de Justicia, Landy Mbolatiana Randriamanantenasoa, ha defendido el proyecto de ley ante el Parlamento argumentando que busca no solo castigar a los culpables, sino también disuadir futuros delitos.
Sin embargo, la propuesta ha generado controversia internacional, con Amnistía Internacional calificando la castración como cruel e inhumana. Mientras tanto, el Consejo Nacional Independiente de Derechos Humanos (CNIDH) ha sugerido que, además de reforzar las penas, se debe abordar el sistema judicial y la corrupción para garantizar la efectividad de las acciones legales y proteger los derechos de las víctimas. Aunque la ministra de Justicia argumenta que la modificación de las leyes es un asunto de soberanía nacional, la discusión sobre la compatibilidad de estas medidas con los derechos humanos continúa
Autor Garry Fabrice Ranaivoso
Fuente L´Express de Madagascar
[Traducción y edición: Bruno Rodríguez]
[CIDAF-UCM]
0 comentarios