La película, Us, escrita, dirigida y coproducida por Jordan Peele, es una metáfora inteligente para los Estados Unidos de América. La afirmación de que «hemos encontrado al enemigo y él es nosotros» se atribuye a personajes populares de los Estados Unidos, desde Abraham Lincoln a Roosevelt y al personaje de dibujos animados Pogo. Esto ha sido repetido por la imagen de espejo de los personajes de Lupita Nyongo (Adelaide Wilson y el doble, Red) que dijeron con un extraño acento extranjero, «nosotros somos Americanos».
La película es una historia de terror con la moraleja de que la mayor amenaza para los Estados Unidos es, literalmente, nosotros. Es un hecho que el terrorismo doméstico mata cada año en Estados Unidos más personas que los terroristas extranjeros. Para los afroamericanos, la mayor amenaza es los afroamericanos y para los blancos, la mayor amenaza es los americanos blancos. Mujeres mataron mujeres y niños mataron niños en “Us” (nosotros). Hay evidencia de que personas matan a más personas que conocen o personas que se parecen a ellas que a extraños o enemigos.
Excepciones a esta ley criminológica de terrorismo doméstico como “homicidio” de masas se producen cuando blancos viajan miles de millas para invadir y conquistar indígenas y cometen genocidio contra ellos para robar sus tierras, mano de obra y recursos. Pero incluso entonces, matan a un montón de gente blanca para decidir qué grupo sería el que reclamaría la propiedad de las nuevas colonias y la riqueza de las mismas. La lucha por África fue lo que llevó a la primera y la segunda guerra mundial imperialistas en las que, según W.E.B.Du Bois, fueron asesinados aproximadamente 80 millones, en su mayoría blancos, por personas que se parecían a ellos.
La idea germinal de la película es que todos tenemos una sombra que tendemos a ignorar mientras nos divertimos sin darnos cuenta de que la gente sombra está celosa de nosotros y le gustaría salir de la sombra para disfrutar de las cosas buenas de la vida. La cita de Jeremías 11:11 puede inducir a error a muchos a pensar que la epidemia de la violencia en el mundo fue traída por Dios, que se niega a escuchar los gritos pidiendo ayuda porque las personas son pecadores malvados. Pero como declaró Ola Rotimi en su reinterpretación de Edipo Rex durante la guerra genocida contra Biafra en Nigeria, “Los dioses no son culpables”.
Un padre (Winston Duke como Gabe Wilson y el doble Abraham) obsesionado con ganar en los juegos de los recintos feriales, descuida vigilar a su hija que se aleja y se encuentra con una atracción que invita al visitante a «encuéntrate”. Aquí está representada la distracción que causan los juegos digitales en las familias. La joven entra en la casa de los espejos y encuentra su propia doble imagen que anhelaba salir del espejo y unirse a ella en el mundo real, pero ella grita y sale corriendo del lugar (o fue secuestrada por la imagen del espejo y encadenada a una cama para robar su identidad, un giro en el cuento sugerido hacia el final, alerta spoiler).
El trauma deja muda a la joven hasta que un psiquiatra recomienda a sus padres que prueben con clases de terapia artística y de ballet que termina disfrutando con la sombra invisible. Ahora adulta, con familia de clase media, la mujer (Lupita Nyongo) es persuadida por su rico marido para regresar al recinto ferial de la playa para unas vacaciones familiares que ella acepta a regañadientes.
Entonces se da cuenta de que no era la única con una sombra viviente, todos son seguidos por una sombra que desea matar al original y reemplazarlo en el mundo con las simuladas imágenes de sombra.
La familia es atacada en su casa de vacaciones por una familia que se parece exactamente a ellos. Se dan cuenta que «Ellos somos nosotros». En shock, intentan huir pero las sombra permanecen con ellos. Huyen en su nuevo bote a casa de unos amigos blancos de la familia en busca de ayuda cuando la policía no responde a sus llamadas al 911. Entonces, encuentran que la familia blanca ya ha sido asesinada por sus sombras mientras Alexa reproducía «F *** the Police» de N.W.A. en lugar de llamar a la policía como había pedido la asustada mujer blanca. La familia afroamericana que huyó de su propia casa ahora se defiende y mata a los asesinos de sus amigos blancos. Esto es probablemente una alusión al hecho de que la gente afrodescendiente lucho en las guerras entre naciones europeas para evitar que un grupo fuera asesinado por otro de gente blanca. Una injusticia en cualquier parte es una amenaza para la justicia en todas partes.
Contribuyendo al discurso sobre control de armas de fuego la película crea un mundo sin armas de fuego, pero las rudimentarias armas de tijeras y bates de béisbol, incendio provocado y lanzas empuñadas por la heroica familia y las triunfantes sombras vestidas de rojo muestran que las armas de fuego no son las únicas armas mortíferas de destrucción masiva.
La raíz de la violencia, según sugiera la película, es que mientras los padres gritan a su hijo por decirle a su hermana «besa mi trasero” (Kiss my a **), los mismos padres disfrutan invitando a los niños a cantar una canción que glorifica la adicción a las drogas. La familia blanca bebe licor fuerte como medicina, pero ninguna de las familias se sienta nunca a alimentar el cuerpo con comida o sueño, ni hay escuela para los niños. Una adolescente es felicitada por sus padres por usar un automóvil como arma para matar a otra adolescente que se le parecía y su madre va a asegurarse de que está muerta. Su hermano prendió fuego a su propio clon por su propia fuerza de voluntad después de ver a su madre apuñalar a muerte a otra mujer. El padre se jactó incluso de suicidarse. Algo funciona terriblemente mal en una sociedad en la que padres se jactan con sus hijos sobre quién ha matado a más personas que se parecen a ellos.
Los atacantes de sombras forman una cadena humana enlazando las manos a través del mapa de los Estados Unidos, pero el entrelazar las manos representa una división entre humanos y sombras en lugar de una unidad global. Al vestirles de rojo, el director de la película puede estar sugiriendo que representaban una amenaza comunista proveniente de un mundo diferente. En realidad, la amenaza de la venganza de las personas espejo es una amenaza desarrollada en el hogar, enfatiza la película, aunque el acento gutural extranjero de las personas espejo huele a xenofobia.
La película hace eco a la teoría postmoderna de Jean Baudrillard que imaginó cómo se sentirían las imágenes de un espejo si pudieran vengarse del mundo real o lo que él llamó la venganza del cristal. ¿Qué pasa si la realidad virtual asesina la realidad y reemplaza todo con el simulacro hasta tal punto de que lo que importa es la diferencia entre el bien y mal y no la distinción entre real e irreal? Concluyó que el resultado sería una estrategia fatal según la cual:
… el ser humano puede encontrar un mayor aburrimiento en vacaciones que en la vida cotidiana — un aburrimiento intensificado porque consta de todos los elementos de la felicidad y el entretenimiento. El punto principal es la predestinación de las vacaciones al aburrimiento, el presentimiento amargo y triunfal de su ineludibilidad. ¿Rechaza verdaderamente la gente su vida cotidiana cuando le buscan una alternativa?
Por el contrario, la abrazan como su destino: la intensifican en apariencias de lo contrario, se sumergen en ella hasta el éxtasis y confirman su monotonía con una monotonía aún mayor. Si uno no entiende eso, no comprende nada de esta estupefacción colectiva, ya que es un magnífico acto de exceso. No estoy bromeando; la gente no quiere ser divertida, buscan una distracción fatal.
Jean Baudrillard, Fatal Strategies.
El mensaje oculto de la película es que si somos nuestros peores enemigos, podríamos asegurar más paz amándonos más a nosotros mismos. En lugar de decir que a veces quieres matar a tu esposo solo por prepararte una bebida, ¿qué tal decir gracias? En lugar de agarrar un bate de béisbol para enfrentar las imágenes de espejo en el camino de entrada, que probablemente son vecinos, ¿por qué no intentar invitarlos a tomar algo? El libro Peacemaking Criminology, de Pepinsky y otros, sugiere que podemos elegir ir por el camino de paz y rechazar el camino de guerra porque la guerra lleva a más violencia.
Una vez que sabes que las personas que te atacan son tus imágenes espejo, ¿por qué no sonreír y decir que la única forma en que podrían lastimarte es si tú te lastimas a ti mismo porque son sólo personas que te imitan? Desafortunadamente, el mundo real hace que el suicidio y la guerra sean más atractivos que los actos amorosos de amabilidad y, por eso, no hay Institutos de Amor en todo el mundo donde se prefieren las Escuelas Militares. Ama al enemigo como a ti mismo porque a veces tú eres tu peor enemigo, testimonió Martin Luther King Jr., siguiendo el evangelio de Jesucristo.
Biko Agozino
* El doctor Biko Agozino enseña Sociología y Estudios Africanos en la Universidad de Tecnología de Virginia, Estados Unidos de América.
Fuente: Pambazuka News
[Fundación Sur]
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