Suazilandia deniega la libertad bajo fianza a los dos activistas, arrestados durante las manifestaciones pro-democracia de este mes, acusados de posesión de explosivos, según un funcionario del tribunal.
Maxwell Dlamini, presidente del sindicato de estudiantes de Suazilandia, y Musa Ngubeni, un miembro destacado del partido de la oposición prohibido, el Frente Democrático del Pueblo Unido, PUDEMO, fueron arrestados durante la represión de las manifestaciones anti gobierno, el pasado 13 de abril.
Los dos fueron acusados de posesión de explosivos, bajo la poco utilizada Acta antiexplosivos, de 1994, basándose en las afirmaciones de la policía que dice haber encontrado en una bolsa que llevaban, detonadores y cables eléctricos.
La vista para su apelación, que ha sido aplazada varias veces, fue retrasada una vez más hasta el día 29 de abril, después de que la fiscalía se opusiera a su puesta en libertad bajo fianza.
Unos 100 estudiantes y jóvenes activistas protestaron después de que el tribunal levantase la sesión, mientras la policía armada vigilaba el lugar desde los tejados del edificio judicial.
“Ellos no hubieran llevado explosivos con controles policiales por todas partes, es de lógica”, protestaba Geez Mthethwa, del también prohibido Congreso de la Juventud de Suazilandia.
“Maxwell admite ser el propietario de la bolsa, pero niega tener ningún conocimiento de que contuviera explosivos”, añade Sikelela Dlamini, de la Campaña pro Democracia en Suazilandia.
Dlamini, que es uno de los líderes de las protestas del 12 de abril contra el régimen del rey Mswati III, también fue retenido por la policía durante varios días.
Si son declarados culpables, los dos hombres se enfrentan a una multa por no tener antecedentes, según su abogado, Mandla Mkhzanazi.
Ocasionalmente, algunos actos aislados de sabotaje son vinculados a la lucha armada clandestina. Los partidos políticos están prohibidos en el reino de Suazilandia, donde el principal partido de la oposición, PUDEMO, opera en la clandestinidad.
En 2008 se produjeron una serie de atentados bomba importantes, incluido uno en un puente cercano al palacio real, por el que un hombre surafricano, relacionado con el partido comunista surafricano, está siendo juzgado en Suazilandia.
(Mail & Guardian, Suráfrica, 27-04-11)