Negligencia en la lucha contra el tráfico de seres humanos, en particular el tráfico de albinos en Mozambique

4/09/2015 | Crónicas y reportajes

El gobierno no toma en serio la lucha contra el tráfico de seres humanos, particularmente el tráfico de albinos, que se ha visto agravado en provincias como Nampula. Esto se debe a que el gobierno no cumple plenamente su tarea de reunir los medios necesarios para afrontar esta situación, que solo podrá detenerse si existe voluntad por parte de los dirigentes y colaboración por parte del pueblo.

Cristóvão Mondlane, procurador provincial de Nampula y líder del organismo Task Force, creado para combatir el tráfico de seres humanos, critica la aparente falta de acción por parte de las autoridades para afrontar dicha situación y cuestiona que, si se puede movilizar a los ciudadanos para que adquieran el NUIT (Número Único de Identificación Tributaria) y paguen los impuestos, por qué no se pone el mismo empeño en proteger a las personas, en salvar sus vidas y en asegurar su integridad física.

Mondlane cree que se deberían llevar a cabo actividades intensivas para sensibilizar a la población sobre la prevención del tráfico de seres humanos. Según él, “los recursos económicos no son suficientes”, pero “la voluntad humana es escasa”. El problema en cuestión no es solo preocupante en la provincia de Nampula, sino también en todo el país.

El tráfico de seres humanos es cada vez mayor, especialmente el de las personas que padecen albinismo (un trastorno genético caracterizado por la reducción o ausencia total de pigmentación en la piel, en los ojos y en el pelo). Las autoridades competentes se muestran incapaces de frenar este delito, según afirma el Task Force, organismo formado por la Liga de los Derechos Humanos, por los medios de comunicación en Nampula y por ONG como Save the Children y Visión Mundial.

Tarcísio Abibo, miembro de la delegación regional de la Liga de los Derechos Humanos en Nampula, lamenta la lentitud de la tramitación de delitos relacionados con el tráfico de seres humanos por parte de las administraciones de justicia, y recalca que los asuntos que deberían tratarse de forma urgente se están tratando con mucha calma.

Según Abibo, el 17 de diciembre de 2014, un joven de 24 años, identificado con el nombre de Auxílio César Augusto, desapareció de la casa de sus familiares, convirtiéndose en una posible víctima de tráfico de seres humanos. Sin embargo, su caso todavía no se ha resuelto.

Abibo también lamenta que la moral de algunas personas haya disminuido tanto que incluso se están exhumando tumbas para obtener dinero a cambio de cadáveres, huesos u órganos humanos. “En Ribáuè, en la localidad de Rente, un grupo de personas invadió un cementerio familiar y extrajo los órganos de un cuerpo con problemas de pigmentación en la piel”. La policía neutralizó a los responsables, quienes fueron liberados a pesar de haber sido sorprendidos con algunos órganos humanos, los cuales “no fueron devueltos a la familia”.

Cabe destacar que el Task Force es un organismo creado por el gobierno que engloba varias instituciones ya mencionadas y que pretende que, mediante su unión, se realice un gran esfuerzo para detener el tráfico de seres humanos. En el año 2000, la ONG sudafricana Molo Songololo dio a conocer un informe sobre el tráfico de mujeres destinadas al mercado sexual en África del Sur. En este informe se identificaron 11 países africanos desde los que se realizaba el tráfico: Angola, Mozambique, Zambia, Sudán, Nigeria, Camerún, Malawi, Cimbabue, Lesoto, Suazilandia y República Democrática del Congo (Terred es Hommes [Alemania] y Save the Children [Noruega]. “Tatá papá, tatá mamã” – Tráfico de menores em Moçambique, 2005).

En los años posteriores, concretamente en mayo de 2003, la Organización Internacional para las Migraciones también reveló un informe en el que afirma que alrededor de 1.000 mozambiqueños cada año, especialmente chicas de entre 14 y 24 años procedentes de zonas rurales y urbanas de Maputo, Gaza e Nampula, eran víctimas del tráfico de humanos de Mozambique a África del Sur (idem).

Frente a ese problema, el gobierno mozambiqueño se demoró a la hora de adoptar una posición para proteger a las víctimas. Actualmente, parece que tal lentitud de actuación se está repitiendo en relación con los casos de los albinos que ya se han denunciado en la región norte, especialmente en Nampula, de donde procede el mayor número de noticias sobre el tráfico y el asesinato de albinos desde principios de este año.

@Verdade

[Traducción, Nerea Freire Álvarez]

[Fundación Sur]

esclavitudes_de_Africa_hoy.jpg

Autor

Más artículos de Administrador-Webmaster