Se dan en África algunos rasgos culturales sorprendentes, a los que vamos a dedicar algunas emisiones. Comenzamos hoy con el matrimonio entre mujeres.
¿Es esta una forma de matrimonio frecuente?
No lo es, aunque se da en alguna tribu. Por ejemplo se da entre los Kurya, una tribu del norte de Tanzania, a orillas del lago Victoria. Una mujer viuda, sin hijos varones, puede tomar como esposa a una mujer más joven que le proporcione descendencia masculina, para que pueda heredar sus tierras y propiedad.
¿Tiene el mismo sentido que el de los matrimonio entre personas del mismo sexo en Europa?
Ciertamente no. Estos matrimonios no comportan un elemento sexual; son matrimonios de conveniencia, que además de proporcionar un heredero conllevan ciertas otras ventajas. Una mujer viuda y sin hijos varones suele permanecer sola y sin protección. Su Matrimonio con una mujer más joven les proporciona compañía y ayuda mutua.
¿Cómo se formaliza este tipo de matrimonios?
En África los matrimonios normales se formalizan por el pago de una dote a la familia de la esposa. Lo mismo ocurre en los casos de matrimonio entre mujeres. La viuda puede casarse con otra mujer previo pago a su familia. En cuanto la nueva esposa da a luz a un hijo varón, entre a formar parte de la nueva familia.
¿Quién es el padre de los hijos de este matrimonio entre mujeres?
Los padres suelen ser varios y el matrimonio de mujeres no suele guardar relación con ellos. Los padres oficiales son el matrimonio original.
La joven esposa puede, a su vez, contraer matrimonio con otro hombre pero si nace un hijo varón de este matrimonio pertenecerá a la pareja que pagó la dote. De hecho es la mujer que pagó la dote quien quien elige a su esposa y a los futuros padres de los hijos.
¿Por qué decide una mujer joven aceptar en matrimonio a una mujer mayor?
En general la mayoría de las mujeres acepta casarse con otras mujeres para tener una mejor vida, que de otra manera no tendrían. Como afirma una joven esposa «La ventaja de casarte con otra mujer es que nos ayudamos en las tareas de la casa y cuando alguna está enferma. Estamos muy bien así, no necesitamos a nadie más«… «Los hombres pueden ser violentos, preferimos estar nosotras solas«. Como podemos constatar, en estos matrimonios la figura del hombre es insignificante.
¿Cómo se sitúan los niños en este tipo de matrimonios?
Para los hijos de los matrimonios entre mujeres los lazos familiares suelen ser confusos, y esto es sin duda un inconveniente. De cara a la legislación moderna la situación es un tanto ambigua. El gobierno no mira con buenos ojos este tipo de matrimonios pero los permite.
Bartolomé Burgos
