El violento dictador de Zimbabue es de nuevo, el mimado capitalista de Occidente.
La razón es muy sencilla: Zimbabue tiene la segunda mayor reserva de platino del mundo, su producción de uranio es para Occidente y Mugabe está de acuerdo en comercializar la mayor operación comercial del mundo en diamantes: Marange.
Mugabe siempre ha sido un declarado capitalista. Bajo sus órdenes, nadie tiene acceso a la propiedad de la tierra. Los privilegios de los blancos en la antigua Rhodesia se acabaron con el dictador.
En los 80, surgió ya un serio problema de corrupción que contaminaba todos, blancos y negros.
Un momento crucial tuvo lugar en 1991, cuando Mugabe fue invitado a participar en el sistema de préstamos “Economic Structural Adjustment Programme” (ESAP) del Fondo Monetario Internacional. (IMF).
Al principio esto propició un crecimiento económico en Zimbabwe pero en realidad lo que crecieron fueron las deudas acumuladas que debilitó la economía del país. Entonces apareció la locura de Mugabe, con inflación aguda, escasez de alimentos, manifestaciones violentas, etc.
Entones se debía haber retirado Mugabe, pero el IMF le ayudó a pagar la policía y el ejército, por miedo a un caos total.
Comenzaron las invasiones de las granjas de los blancos, lo cual era imparable en semejante situación. Así comenzó la era de corrupción general mientras el loco Mugabe pagó para seguir en poder.
De repente todo ha cambiado y Mugabe es de nuevo el protegido capitalista de Occidente. Francia ya ha comenzado relaciones comerciales con Zimbabwe debido a sus reservas de platino, uranio, diamantes, etc. La producción de tabaco ha vuelto. Los viajes turísticos por los parques nacionales han recomenzado.
Mugabe es una marioneta de Occidente, y su locura aumenta cada día, pero existen poderosos padrinos que lo manipulan y sostienen.
Fuente: Pambazuka news. Douglas Schorr. Enero 2016.
Traducido y editado por AFS.