«Vaya Ud. a Zimbabue y pregunte a la gente si debería retirarme. Se enfadarán con Ud.».
Estas fueron las declaraciones del presidente Robert Mugabe en una entrevista con periodistas japoneses mientras continuaba con su visita al país.
También sugirió que las peticiones para que ponga fin a su larga estancia en el poder no vienen de los zimbabuenses.
«Si no les gusta mi larga permanencia en el poder deberían criticar a mi pueblo, yo no voto por mí mismo».
Pero el líder de 92 años de edad admitió, en una reciente manifestación en Bindura, que algunos miembros del ZANU-PF (partido gobernante) y el movimiento de los veteranos de guerra quieren que renuncie.
Preocupado por sus intenciones reales, Mugabe reaccionó con firmeza cuando los veteranos de guerra trataron de reunirse en Harare el mes pasado, rociándolos con gas lacrimógeno y luego lavándolos con cañones de agua.
Pero al darse cuenta de que la rebelión no había sido sofocada, convocó una reunión de crisis para el 7 de abril con el líder de los veteranos ex combatientes para ver si se atreven a hablar abiertamente.
La reunión ha sin embargo, a nivel público tiene como objetivo discutir cuestiones relativas al bienestar de los veteranos.
«Tonterías», declaró un funcionario del partido al NewZimbabwe.com.
«La Ley de Veteranos de la Guerra detalla los derechos de los ex combatientes, sus viudas y sus niños. Mugabe simplemente tiene que dar la orden a tesorería para que se les pague lo que se les debe.
«No es necesario convocar una reunión nacional, incluyendo a los jefes de los servicios de seguridad para discutir lo que por ley está claro».
El funcionario del partido ha añadido: «el hecho es que Mugabe se da cuenta de la magnitud y la profundidad de la rebelión contra su gobierno.
«Es por eso que de inmediato se disculpó por haber gaseado a los veteranos. Utilizará la reunión del 7 de abril para comprobar y solucionar el descontento de los veteranos. «Esperaremos para ver si tiene éxito».
Mientras tanto, en Japón, Mugabe insistió en que si su salud se lo permite, él se presentará de nuevo para el cargo en 2018, que es para cuando las próximas elecciones están previstas.
Él explicó: «en este momento yo soy el Presidente, es por eso que estoy aquí ¿Me ven como no apto? ¿Por qué no lo discuten dentro de dos años?
«Sólo Dios sabe lo que va a pasar en dos años, en 2018. No sé, dependerá”.
«Si estoy lo suficientemente en forma, sí me presentaré, pero si no estoy suficientemente en forma no lo haré. Mi gente quiere que yo sea candidato y que ya me han nominado como candidato para el 2018».
Mugabe está de visita en Japón por invitación del primer ministro, Shinzo Abe, quien considera la influencia del líder zimbabuense clave en África para ayudar a Japón a contrarrestar la influencia china en el continente.
allafrica.com
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