Un policía resultó muerto el día 21 de marzo, cuando la policía actuaba para poner bajo arresto preventivo al líder de la oposición de Uganda, Kizza Besigye.
Besigye permaneció contra su voluntad en su casa de Kasangati.
La policía recordaba a la ley de la era colonial, bajo la cual el doctor Besigye ha sido retenido muchas veces, para impedirle que participe en manifestaciones públicas, después de la muerte del ayudante del inspector de la policía, John Bosco Ariong.
El oficial fue golpeado con un objeto cuando la policía dispersaba a la multitud que intentaba participar en la marcha de A4C, Activistas por el Cambio, en el centro de la ciudad.
El señor Ariong deja una viuda y ocho hijos.
En un comunicado emitido el día 21 de marzo por la noche, la portavoz segunda de la policía, Judith Nabakooba, dijo que la violencia contra los oficiales de policía cuando están de servicio será investigada con severidad y los responsables de la muerte del ayudante del inspector serán llevados ante la justicia, aunque las investigaciones todavía están muy al principio.
“Ariong, de 48 años, trabajó para la policía durante 26 años, y murió de camino al hospital, después de recibir un golpe por una piedra en la cabeza”.
La portavoz dijo que el oficial asesinado había sido desplegado como parte de una operación para garantizar el mantenimiento del orden público durante la marcha ilegal, liderada por Besigye.
Más tarde, el día 22, el líder de la oposición ugandesa Besigye fue puesto en libertad bajo fianza, según el diario ugandés, Daily Monitor.
(Africa Review, Kenia, 22-03-12)