Miquel Silvestre se considera sobre todo escritor. Descubrió que para encontrar las verdaderas historias había que ir hacia ellas. Arranco su moto el 15 de abril de 2008 para visitar la Toscana italiana. Nunca antes había salido de España y le pareció una gran aventura. A partir de esa fecha no ha parado. Hasta el momento ha visitado 60 países, todos ellos en moto pues no concibe el viaje sin este vehículo. Le gusta llegar a lugares lejanos siempre sobre esta montura. Publica “Un millón de piedras” la crónica de un trayecto de cuatro meses desde Kenia a Sudáfrica y Namibia.
Miquel Silvestre nació en Denia (Alicante) en 1968. Es un hombre hiperactivo con vocación de escritor que ha encontrado en el viaje en moto la solución a sus inquietudes. Tras irse a la Toscana, hizo Estados Unidos de costa a costa por el sur, casi siempre pegado a la frontera mexicana. Le salió la posibilidad de irse a Kenia a colaborar con una organización humanitaria. Tenia seis mil euros ahorrados y con ellos compro en Nairobi una moto a un alemán. Realizo un tour por el país y le gusto. Pensó que quizás podía llegar hasta Ciudad del Cabo y así lo hizo.
Visito 14 países. Durmió en hoteluchos de mala muerte, supero baches, polvo, arena y un accidente en Sudáfrica en donde fue salvado por un “ángel”.
La experiencia africana supuso para Miquel una transformación personal. Dejo momentáneamente su trabajo de oficinista como registrador de la propiedad.
El siguiente destino fue el Asia Central. Partió de Madrid y llego hasta Almaty, en Kazajstán frontera con China. Regreso desde Uzbekistán por la Ruta de la Seda. Visito Azerbaiyán, Georgia, Turquía, Siria, Jordania, Líbano, en el puerto israelí de Jaifa se embarco a Chipre, vuelta a Turquía, llegó hasta las islas griegas y de ahí regreso a casa.
Cruza Canadá de costa a costa. Realiza el camino de Madrid a Dakar, Bamako y Segú en donde a orillas del río Níger se le rompió la moto. Ahora esta arreglada y se la cuida un alemán.
Tras estos periplos se asentó de nuevo en Canobelles, población cercana a Barcelona, en donde volvió a la oficina. Entonces tuvo la idea, durante cuatro meses, cada fin de semana avanzar sobre el mapa europeo. La primera etapa fue a Zurich. Regreso en avión a Barcelona y el siguiente fin de semana retomo la ruta y llego a Viena. Finalizo en los Balcanes después de 15.000 kilometros. Lo hizo gracias a la compañía Vueling que a cambio de reportajes le pago los billetes de avión.
Junto todas las vacaciones y en noviembre y diciembre de 2010 se fue desde Barcelona a Urmia en Irán, provincia de Azerbaiyán Occidental. Regreso por la zona del Kurdistan iraquí. En la frontera el policía sorprendido al ver a un motorista llegado de tan lejos le pregunto el por qué de su visita. Miquel le respondió porque no se cree nada de lo que se ve en la televisión y lo quería comprobar por si mismo.
Una vez en Turquía, fue de nuevo a Siria, Jordania, Líbano, Egipto, Libia y Túnez. En estos países iba dejando a tras los levantamientos populares. A su paso parece que se incendiara todo. Quizás fuera el ultimo viajero solitario que visito Libia antes de la guerra.
Miquel Silvestre estuvo en el programa de Radio Euskadi La Casa de la Palabra el jueves 1 de abril de 2011.
“Un millón de piedras” está editado por Barataria. www.barataria-ediciones.com
Podéis escuchar el programa en La casa de la palabra
