Un hombre armado ha matado a tiros al director del Programa de Desarrollo de la ONU en Somalia, Osman Ali Ahmed, a la salida de la mezquita en la capital del país, Mogadiscio.
Este es el último de una serie de ataques a oficiales en el caótico país. Los grupos islamistas están protagonizando una insurgencia contra el gobierno de Transición y las tropas etíopes que les apoyaron en 2006, para expulsarles del poder.
El señor Ahmed fue atacado en el distrito del sur de Mogadiscio, a la salida de los rezos matutinos en la mezquita de Bulohube. Su hijo y otro hombre resultaron heridos en el incidente. Osman Ali Ahmed fue trasladado vivo al hospital, donde falleció al poco tiempo por causa de las heridas de bala.
El día anterior, una explosión en la capital mató a un oficial somalí, a su mujer y a otras cuatro personas.
La violencia se ha recrudecido en Somalia en las últimas semanas, a pesar del acuerdo de paz firmado entre el gobierno y una facción de los islamistas, el mes pasado.
Las tropas etíopes, presentes en Somalia para apoyar al Gobierno de transición, aseguran que la semana pasada mataron a al menos 71 islamistas.
Miles de personas han huido del país a los largo de este año, y la situación cada día se deteriora más. Naciones Unidas ha advertido que la mitad de la población de Somalia, necesitará asistencia internacional a finales de este mismo año.
(African News Agency, 07-07-08)
