Hasta 1.500 partidarios del régimen de Jartum en Sudán, se manifestaron para protestar en el palacio republicano de Jartum, el pasado día 17, gritando eslóganes como “muerte a Ocampo”, el fiscal del Tribunal Penal Internacional, por haber pedido al tribunal que se ordene el arresto del Presidente de Sudán, Omar Al-Bashir.
Al grito de “Dios es grande” o “sigue adelante Bashir”, los estudiantes y jefes tribales árabes de la región de Darfur, al oeste de Sudán, condenaban enfadados las acusaciones contra el jefe de Estado por genocidio y crímenes de guerra.
El fiscal internacional, Luis moreno Ocampo, acusó el pasado día 14 a Bashir de ser el cerebro de una campaña genocida contra tres grupos étnicos de Darfur, y pidió que se emitiese una orden de arresto internacional, por genocidio, crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra.
El partido Congreso Nacional, de Bashir fue el que organizó la protesta de dos horas de duración, en la que la multitud coreaba: “nosotros, las tribus de Darfur, apoyamos a Al-Bashir”, “Muerte a Ocampo” o “Protegeremos a nuestro Presidente de cualquier arresto”. Los manifestantes consideran que Ocampo ha insultado gravemente al Islam, según rezaban los carteles que mostraban.
Como muestra de la complejidad del conflicto de Darfur, asistieron a la manifestación de protesta representantes étnicos de las tribus que Ocampo considera que el gobierno de Bashir quiere exterminar, pertenecientes al partido del Gobierno. “¿quién le ha dicho a Ocampo que hable en nuestro nombre?” gritaba furioso un representante del pueblo fur por el megáfono.
Sudán se ha negado a entregar a dos sospechosos requeridos el año pasado por crímenes de guerra en Darfur, y espera persuadir a los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU para que ejerzan su derecho a veto para aplazar cualquier proceso judicial contra su Presidente.
El conflicto de Darfur estalló en 2003, cuando rebeldes de las minorías étnicas se levantaron en armas contra el régimen dominado por los árabes, de Jartum, y contra las milicias respaldadas por el Estado.
La ONU dice que han muerto ya 300.000 personas y más de 2.200.000 millones han sido desplazados, Jartum corrige mantiene que los muertos son sólo 10.000.
(IOL, 18-07-08)