Es difícil decir si la recién estrenada fuerza política de Suráfrica se convertirá en un éxito sonoro que hará que el ANC se ponga de rodillas, o en un fracaso espectacular en donde el movimiento político “todas las cosas para todos”, eventualmente se quedara sin fuerzas.
Por ahora Mamphela Ramphele se proyecta a sí misma como un híbrido entre una diosa griega de la Sabiduría de Atenas, una inspirada Eva Perón y los Nongqawuse de África, los Xhosa profetas de la Desgracia. La única cosa segura que sabemos es que ella planea presentarse a las elecciones de 2014.Y tiene desparpajo.
Mamphela Ramphele, economista y académica ciertamente ha conseguido la atención del país. Se paseó en los Medios como un bombo publicitario para hablar acerca del inminente lanzamiento de su nuevo partido político y guardó sus cartas muy en su interior hasta que anuncio su presentación el pasado día 18 de febrero.
Todo estaba bien coreografiado para maximizar la teatralidad de su anuncio. El lugar era la histórica prisión de Mujeres en la Constitution Hill y el escaso detalle acerca del suceso aseguró la presencia de los Medios -tanto locales como internacionales. Ramphele llegó flotando dentro de la habitación flanqueada por una cuadrilla de corpulentos guardaespaldas y se sentó en el frente de la habitación como una ruborizada debutante.
Fue presentada por la activista de género Nombosino Gasa, quien tamborileó más la anticipación. Y cuando Ramphele subió al podio para hacer su discurso, fue verdaderamente una impactante actuación. Ella utilizó todas las teclas adecuadas, se nutrió del descontento de las masas acerca de los puntos malos del Gobierno e hizo una evocación acerca de las esperanzas y los sueños sobre los que fue construida la democracia de Suráfrica.
“¿Os acordáis del sueño que abrazamos de construir una gran sociedad- una democracia constitucional próspera y unida en su diversidad? ¿Os acordáis de nuestro compromiso de promover la dignidad humana (Ubuntu) y hacer desaparecer la humillación y la falta de respeto de nuestro pasado de apartheid? ¿Os acordáis de nuestra promesa de promover transparencia y responsabilidad en la vida pública? ¿Os acordáis de que estábamos de acuerdo en que nuestra democracia sería conocida por ser una respuesta a las necesidades sociales y económicas de todos los ciudadanos? ¿Os acordáis?”.
Ella resumió toda su trabajosa carrera en una frase: “He tenido que saltar las altas barreras de oportunidad enfrentándome a mucha gente negra, especialmente la de las mujeres rurales, para llegar a ser una activista, una doctora en medicina, una activista del desarrollo de la comunidad, una investigadora, una ejecutiva en la Universidad, una trabajadora publica del Banco Mundial y ahora una ciudadana activa en ambos sectores público y privado”.
Y en lugar de echar piedras al Gobierno actual, Ramphele jugó el papel de una mujer de estado aceptando responsabilidad por lo que se ha hecho mal.
“El sueño se ha desvanecido para muchos que viven en pobreza y destitución en nuestra sociedad de creciente desigualdad. Y lo peor de todo, mi generación tiene que confesar a la gente joven de este país: nosotros os hemos fallado. Nosotros hemos fallado en construir para vosotros una educación y un sistema de formación para prepararos para la vida en el siglo XXI. Por lo que, el sueño se ha desvanecido para los jóvenes en las dos áreas, urbanas y rurales.
Unos días después que el Presidente Jacob Zuma, presentó un discurso mecánico y desinflado a la Nación, Ramphele giró bruscamente hacia el otro extremo, jugando con las emociones populares y la desilusión acerca de la pobre actuación y la corrupción en el Gobierno.
“Nuestro país está en riesgo porque el interés propio ha llegado a ser el motor de muchos que están en posición de autoridad y que se deberían estar concentrando en servir al público. La gran sociedad a la que nos comprometimos nosotros siguiendo nuestra pacifica transición política se esta descosiendo delante de nuestros ojos. Los impresionantes logros de los 18 años pasados están siendo debilitados por una gobernanza pobre a todos los niveles de la sociedad. Una cultura sin control de impunidad y de abuso de poder al igual que en los recursos públicos roban a los niños, gente joven, gente pobre rural y urbana de los frutos de la libertad.
“Corrupción, nepotismo y clientelismo se han convertido en las marcas de la conducta de muchos en el servicio público. Corrupción es robo. Roba los libros de texto de nuestros niños de escuela. Roba medicinas de nuestra gente enferma. Roba fondos sociales de la gente mayor y niños pobres. Roba a los ciudadanos la esperanza y destruye nuestros sueños. Esta plataforma política de partido declarara la guerra a la corrupción. Trabajará con todos aquellos en la sociedad civil y ciudadanos y dedicados del servicio público que comparten nuestros preocupaciones de luchar esta lacra”, dijo Ramphele.
Su discurso fue impecable, rezumaba carisma e hizo cada punto con convicción. Ella es un paquete poderoso de credenciales de lucha, una mujer erudita, una respetada figura internacional, una exitosa mujer de negocios y una impresionante comentadora social. Ramphele atrae a la gente con su discurso magnético que mantiene la atención de un auditorio. Todo esto, unido al hambre en Suráfrica de un liderazgo bueno e inspirador, significa que el momento era de ella para su beneficio.
Cuando anunció la formación de un “partido político plataforma” bajo el nombre de “Agang” (que ella explico significa construir el lenguaje surafricano de sesotho) fue casi evangélico.
“Estoy aquí hoy para invitaros, jóvenes y mayores, a re-imaginar el país de nuestros sueños y comprometernos a convertirlo en una realidad en las vidas de cada surafricano. He dicho que no soy el Mesías. Ningún individuo actuando por sí mismo puede construir nuestra nación en el país de nuestros sueños. Pero tengo la voluntad de ser un puente entre mi generación -aquellos de nosotros que luchamos por la libertad que recuerdan no solo con sus mentes sino también con sus corazones-y la de mis hijo.”
Pero ahí es donde pasó a ser banal.
En lugar de anunciar una campaña de un millón de firmas para la reforma electoral, Ramphele fue muy corta en sus detalles de lo que quería hacer. Estaba todo bien cubierto como un discurso contra la pérdida del sueño de Suráfrica y “un masivo fracaso de gobernanza”. Pero aparte de un elaborado diagnostico de todos los problemas de Suráfrica y los fracasos del ANC -todos los cuales son bien sabidos- no hubo nada tangible como base por lo que luchar y ganar las batallas electorales.
Ella anuncio que estaba “trabajando con un grupo de ciudadanos” para formar una plataforma partido político que consultaría con la gente a través de todo el país hacia la formación de un partido político. Y fue solo mas tarde durante la Conferencia a los Medios cuando confirmó que intentaba presentarse a las elecciones nacionales de 2014, pero no está claro qué defenderá el partido que liderara y dónde se posicionará dentro del espectro ideológico.
Ramphele habló mucho sobre que el partido estaría definido durante el proceso consultativo, y durante el cual ella se pondría en contacto con otros partidos políticos. No ha cerrado la posibilidad de unir fuerzas con otros partidos, pero niega que haya tenido encuentros con Alianza Democrática , AD, antes de decidir empezar su propia iniciativa.
Ramphele no dio respuestas concretas de con quien está trabajando, excepto de «nosotros somos un energético equipo de cinco». Pero la web Politics dijo que los registros de Whois.co.za indican que el dominio agangsa.co.za está registrado a nombre de una organización sin-ánimo de lucro llamada Gran Potencial por Suráfrica.
La compañía fue registrada con la Comisión y Compañía de Propiedad Intelectual el 14 de diciembre del año pasado. Sus directores, todos los cuales fueron nombrados el mismo día están listados como Prince Mashele, Brutas Malada, Moeletsi Mbeki y Ramphele. Mashele y Malada son parte del grupo Midrand, y Mashele desde entonces se ha distanciado de Mbeki.
Mbeki atendió el acontecimiento el día 18 de febrero, pero dijo que simplemente estaba allí para «escuchar».
Ramphele tampoco explicó cómo sería financiado su movimiento -aparte de que sería financiado por «surafricanos en Suráfrica y en la diáspora».
La pista de financiamiento extranjero le dio al ANC la posibilidad de denunciar la formación política de Ramphele sugiriendo que hay una dudosa influencia extranjera en la agenda detrás de todo ello.
Este pronunciamiento llega después de los esfuerzos por recoger fondos de la doctora Ramphela en países extranjeros incluidos los Estados Unidos de América. «Esperamos que el bombeo de fondos extranjeros en Suráfrica no debilite mas la democratización y transformación del país», dijo el portavoz Mthembu en su declaración.
Mientras que la mayoría de los partidos políticos de la oposición dan la bienvenida a un nuevo jugador en la arena política, el ANC dijo que «Ramphele está llevando a los surafricanos a participar en la periferia de nuestra política».
«Nosotros también creemos que con esta iniciativa de quejas, en las que la doctora Ramphela discute los nuevos problemas con los que se encuentra nuestro país, no contribuye con ninguna nueva idea sobre la mesa», Dijo Mthembu.
El sindicato Cosatu inmediatamente descartó la iniciativa de Ramphela, diciendo «sus políticas económicas son totalmente indistinguibles de las ideas neoliberales de la Alianza Democrática».
«Desnuda de su retorica grandilocuente, el discurso Mamphela Ramphele no ofrece soluciones a la triple crisis del desempleo, pobreza y desigualdad y solo fue un manifiesto de neoliberalismo. Ella habla por la clase capitalista que la ha abrazado y que ve en ella ahora una salvadora contra sus enemigos de la clase trabajadora», Cosatu dijo en su declaración.
Pero la verdad es que nadie sabe en este momento lo que el movimiento de Ramhele va a aportar, cuáles pueden ser sus políticas y cuales las plataformas por las que ella hará campaña. Con solo un año antes de las elecciones nacionales, no está claro cómo su iniciativa se traducirá dentro de un partido político y si puede arrastrar a masas. Mientras, está jugando con el descontento en la sociedad, sin una máquina o recursos que ayuden a la iniciativa, su habilidad para desarrollar una formación política formidable está limitada.
El mensaje de Ramphele el día 18 fue extraordinariamente parecido al mensaje de la antigua secretaria de estado Hillary Clinton, y de entonces Senador de Estados Unidos, cuando anunció en 2007 que se presentaba para la Presidencia.
Clinton llamó a su campaña consultativa «un comité exploratorio presidencial» el cual también dijo que sería una «conversación» nacional. Ella, también quiso jugar con el descontento de los estadounidenses bajo la presidencia desastrosa de George W. Bush. «El diálogo» de Clinton aparte de haber producido una campaña poderosa, no ganó la presidencia. Fue su lema directo de Barack Obama «Sí, nosotros podemos” (Yes, we can) el que recogió el éxito.
Ramphele, a pesar de su impresionante personalidad, nunca ha medido su apoyo o su atracción en el terreno antes que ahora. Y sin embargo intenta ir contra el partido del gobierno que domina el 60% de los votos y tiene 1.2 millones de afiliados en todas sus ramas a través del país.
Es un extraordinario y valiente paso el de ponerse ella misma puramente sobre la base de sus credenciales y aspiraciones. Ramphele quiere cambiar la pelota del juego electoral y hacerse con el ANC siendo lo que no es. Lo que es, eso exactamente, está por ver.
Partidos basados en personalidades y campañas negativas no han tenido hasta ahora ningún éxito en presentar al ANC un verdadero peligro.
Ramphele piensa que ella tiene lo que puede hacer cambiar esto. Ella ha puesto el Kool-Aid ahí. Vamos a ver si Suráfrica lo bebe.
Por RANJENY MUNUSAMY
Nota: Kool Aid es una bebida, es una metáfora en términos políticos.
Publicado en Daily Maverick, Suráfrica, el 19 de febrero de 2013.
Traducido por Amparo Cuesta, de Fundación Sur.
