La radio local Ndeke Luka, informó que ningún vehículo puede entrar o salir de Bambari ( localidad situada a 400 kilómetros al noreste de Bangui ), la medida está vigente desde hace tres días, cuando la Seleka estableció su cuartel general en la ciudad. Los rebeldes decidieron “aislar” a Bambari para “detener la infiltración de milicianos de la autodefensa Anti-Balaka”, el grupo rival, en la región de Ouaka, en el centro del país. También están bajo el control de Seleka las principales carreteras entre Bangui y Bambari y entre Bambari y Alindao, que se encuentra a 100 kilómetros de distancia.
Las declaraciones del prefecto de Ouaka El Hadj Abakar Outman tranquiizaron a la opinión pública al señalar que Seleka tomó esto como “una medida de seguridad provisoria para mejorar la situación en el terreno”, que no representa “un riesgo de división del país, que nadie puede dividir”.
Catorce meses después del golpe de Estado, la República Centroafricana sigue siendo escenario de una violenta confrontación armada entre Seleka y Anti-Balaka, que están divididos en varias facciones.
Fuente MISNA