Según fuentes militares los rebeldes de Sudán del Sur se han apoderado de una ciudad clave, mientras continúan los combates tras el intento golpista comunicado el domingo. El portavoz del Ejército, Philip Aguer, declaró que «Nuestros soldados han perdido el control de Bor que ha caído en manos de las fuerza de Riek Machar». El presidente Salva Kiir ha acusado a Machar, el depuesto vicepresidente, de la organización de un golpe de Estado, una afirmación que Machar niega.
Los disturbios, que comenzaron en Juba, la capital, ya han ocasionado la muerte de unas a 500 personas y provocado temores de una guerra civil.
Naciones Unidas ha hecho un llamamiento a favor del diálogo político para poner fin a la crisis, y el Secretario General Ban Ki-Moon, comunicó que unas 20.000 personas se habían refugiado en las instalaciones de la ONU en Juba.
Gran Bretaña y los EE.UU. han enviado aviones para transportar a sus nacionales fuera del país, y un funcionario de defensa de los EE.UU. describió la situación como que se estaba» poniendo tensa».
Enfrentamientos armados
El miércoles, el alcalde de Bor, Nicholas Nhial Majak, declaró al programa Focus on Africa de la BBC que la violencia se había propagado allí desde Juba, a 200 kilómetros. Bor es la capital del estado de Jonglei y está considerada como una de las áreas más volátiles de Sudán del Sur.
Durante la noche se informó de enfrentamientos armados en la ciudad entre oficiales renegados y tropas aún leales al presidente. El portavoz del ejército informó a los periodistas que » Hubo disparos anoche… no tenemos información sobre los daños o los desplazados en la ciudad, ya que las operaciones están en curso”. Aguer, agregó que las autoridades de la ciudad no estaban respondiendo a sus teléfonos y se cree que han desertado al lado de los rebeldes.
Standard Digital (Kenya)