El grupo rebelde M23, apoyados por Ruanda según los organismos internacionales, ha recuperado la ciudad de Shoa, en la provincia de Kivu Norte, al este de la República Democrática del Congo, tan solo un día después de que la ciudad cayera brevemente bajo el control del ejército congoleño y la milicia progubernamental Wazalendo.
Según informaciones de residentes de la zona, los rebeldes lanzaron una ofensiva sorpresa la madrugada del 7 de septiembre, obligando a los Wazalendo a retirarse. Los fuertes combates sacudieron la zona durante el 6 de septiembre, pero la calma regresó el pasado domingo por la tarde.
La ciudad de Shoa, que se encuentra en el territorio de Masisi, una región rica en oro, cobalto y tantalio, es un foco de violencia debido a los ataques del M23. Este último enfrentamiento se ha producido a pesar de los últimos esfuerzos de paz. En julio, la República Democrática del Congo y grupos rebeldes, incluido el M23, firmaron un alto el fuego en Doha, pero los combates no han hecho más que intensificarse.
El gobierno congoleño, la ONU y países occidentales acusan a Ruanda de respaldar al M23. La semana pasada, los rebeldes Twigwaneho, aliados del M23, se enfrentaron con la milicia Wazalendo respaldada por el ejército en varias aldeas de Kivu Sur.
Oficiales del ejército congoleño han criticado duramente los renovados ataques rebeldes, calificándolos de «flagrante violación» de los acuerdos de paz de Washington y Doha, lo que pone de manifiesto, una vez más, la frágil situación de la seguridad en la región.
Fuente: África News
[Traducción y edición, Jesús Zubiría]
[CIDAF-UCM]