La garantía de los derechos de pastoreo y, en general, más atención a un grupo mantenido al margen durante mucho tiempo y excluido de las decisiones políticas, son las demandas de siete asociaciones que representan a 12 millones de Fulani, una comunidad de pastores musulmanes que a menudo se ve involucrada en enfrentamientos por las tierras en las regiones centrales de Nigeria.
En un documento presentado al Gobierno Federal de Abuja, las asociaciones afirman que los enfrentamientos con los agricultores en los estados de Plateau, Taraba y Kaduna hicieron peligrar los medios de vida de la comunidad.
Según las asociaciones, entre 2001 y 2010 sólo en Plateau los ataques provocaron cientos de muertes y la pérdida de tres millones y medio de cabezas de ganado, informó hoy el periódico nigeriano “Leadership”.
“El gobierno debe darse cuenta de que si se les priva de los medios de vida a 12 millones de personas, se genera una situación explosiva”, dijo Saleh Buyari, representante de Allah Miyetti Cattle Association of Nigeria.
Según estimaciones publicadas en Abuja por el Ministerio de Educación, en la actualidad hay tres millones de niños Fulani que no asisten a la escuela. La alta tasa de analfabetismo entre los miembros de la comunidad (en 2005 era del 98%), contribuiría a su exclusión de las decisiones políticas. “El sistema moderno introducido durante el dominio colonial prevé procedimientos burocráticos que favorecen a la élite instruida”, dijo Buyari.
En los últimos años, los fulani se han enfrentado varias veces con los Berom y otras comunidades de agricultores. Estos conflictos, a pesar de que son provocados principalmente por factores económicos y sociales, a menudo son etiquetados por la prensa internacional como religiosos.
(MISNA – Missionary International Service News Agency, 12-09-12)