Aquellos que estuvieron con el difunto Amos Midzi – un ex ministro de gabinete, embajador de los Estados Unidos, legislador de Epworth y presidente provincial de Harare para el Zanu Frente Patriótico – horas antes de que muriera el martes de la semana pasada dicen que había caído al abismo de la desesperación y no veía luz al final del túnel de su problemática vida.
Midzi se suicidó en su Granja Munandi en Beatrice después de haber sido suspendido del Zanu Frente Patriótico por cinco años después de que el partido comenzó a hacer una limpia de miembros que tuviesen vínculos con el derrocado ex vicepresidente Joice Mujuru. “Pasamos el día juntos en la granja y alrededor de las 4:30pm se dirigió a los trabajadores respecto a los problemas de salarios que no habían sido pagados,” dijo un miembro cercano de la familia quien pidió el anonimato.
“Se podía ver por la cara que tenía y su comportamiento que era un hombre preocupado, pero no sabíamos qué era exactamente lo que le atormentaba además de los problemas financieros a los que se aferraba, que afectaban los trabajos del día a día de su granja”. “Hasta dijo hapachina chekuraramira, kufu kurinani, (ya no hay razón para seguir viviendo, es mejor morir) y pensamos que nada más era un comentario ya que todos estamos consientes de la situación económica”, dijo el familiar.
El hermano mayor de Midzi, Ngonidzashe, narró el martes al Zimabawe Independent los eventos que llevaron a la muerte de su hermano. “Desde enero Amos no era él mismo y lo podía sentir cada vez que lo visitaba”, dijo Ngonidzashe.
“Debió de haber planeado esto desde hace mucho tiempo porque su comportamiento había cambiado mucho y se había vuelto extraño. Las llaves de su casa de la granja eran guardadas por su sobrino, pero se las había quitado y le había obligado a mudarse de la casa e irse a vivir a una casa cercana diciéndole que necesitaba privacidad”. “Tampoco visitaba ya la granja en compañía de su esposa como lo solía hacer, y también comenzó a ir a horas extrañas”.
Ngoniszashe también dijo en el día de su muerte Midzi fue solo a la granja, y se fue con el administrador de la granja cerca de las 11pm”. “La esposa de Midzi llamó al administrador cerca de las 11:30pm y éste le dijo que su esposo se había ido ya de la granja. El administrador no estaba enterado de que Midzi no se había ido de la granja realmente pero que manejó unos metros más de los establos de tabaco dentro de los arbustos cercanos”.
“El guarda de seguridad todavía lo estaba esperando en el portón para poder abrirle como siempre pero Midzi no apareció. Cerca de la media noche su esposa volvió a llamar; fue ahí cuando el administrador fue a preguntarle al oficial de seguridad adonde estaba. El oficial le dijo que Midzi no se había ido de la granja ya que nunca apareció en el portón, pero que había manejado hacia el lado opuesto de los establos donde desapareció en la oscuridad”.
“El administrador comenzó a seguir los rastros del carro en donde lo encontró muerto”.
Después de las continuas limpias que caracterizaban al Zanu PF después del controversial congreso en diciembre, Midzi fue derrocado como presidente de Harare junto con muchos otros por “no cumplir con su mandato gubernamental al invertir su energía y tiempo en alegada corrupción y políticas partidistas” y conspiraciones para derrocar a Mugabe.
Después de que fue sacado de Zanu PF los familiares dijeron que Midzi estaba muy deprimido y que llegó a depender de drogas para poder dormir.
Además de la presión política y de los sentimientos de rechazo por su partido al que le había servido la mayor parte de su vida, los problemas financieros eran un factor importante – la compañía de manufactura de plástico de Midzi en Masa – había cerrado el año pasado, dejando en un limbo a trabajadores que trabajaban sin salario por más de dos años. Midzi no es el primer oficial de Zanu PF en suicidarse después de haber sido sacado despiadadamente del partido que dirige una red de pozos de petróleo de donde el presidente Robert Mugabe obtiene la mayor parte de su duración.
Los conflictivos líderes de Zanu PF para quienes las políticas o más específicamente la amplia red de patrocinio del partido, es todo lo que han conocido desde la independencia en 1980, va a enfrentar siempre una “Siberia política” después de ser suspendido o echado del partido gobernante.
Los contínuos eventos que pasan en el partido gobernante caracterizados por suspensiones y expulsiones sugieren que más “peces gordos” están destinados a la vergüenza de ser desechados, dirigidos a una existencia llena de miseria.
Muchos de los oficiales de Zanu Pf son políticos de profesión que conocen poco menos de lo que es vivir una vida de ricos, con numerosos viajes y grandes mesadas por acompañar a Mugabe en sus viajes, lujosas motocicletas, vacaciones pagadas fuera del país, sirvientes y muchos otros beneficios que trae ser un político “pez gordo” del Zanu PF.
Es cuando se ven fuera del partido que se enfrentan con un mundo duro de oscuridad y labores difíciles – irónicamente esta es la esfera en donde los mismos políticos han asistido a Mugabe a construir y entregar a la mayoría de zimbabuenses durante 35 años de un desastroso mal gobierno.
En el 2005, se reportó que Enos Chikowore se había suicidado por desesperación y enojo, poco después de que Mugabe anunciara un nuevo gabinete que lo excluía.
En 1989 se reportó que Maurice Nyagumbo se suicidó después de haber sido despedido del gobierno por su participación en el escándalo del carro de Willowgate, y de haber sido humillado por multitudes que él creía le adoraban.
Otros antiguos “peces grandes” del partido como el difunto Clement Machachi y Nathan Shamuyarira también descubrieron después de desembarcar del soñado barco de Zanu PF hay un mundo crudo.
Shamuyarira, declarado héroe nacional cuando murió el año pasado, se había convertido en una pálida sombra de la ideología consumiente marxista- lenista que solía utilizar en sus días de gloria como Ministro de Información y Asuntos Internacionales en el gobierno de Mugabe.
Para Muchachi fue peor, descendiendo a la profundidad de la pobreza que incluía dejar atrás las comodidades de una posición ministerial en el primer gabinete post independencia para adoptar una vida rústica en un pedazo de tierra de apenas dos hectáreas en su pueblo en Shurugwi. Murió como un indigente en el Hospital de Gweru en el 2001. El mismo destino le esperaba a Edgar Tekere quien murió en 2011.
Sim embargo, la vida no se le volverá tan dura aunque sea vivida en relativa oscuridad comparado a lo que se estaba acostumbrado para el recientemente expulsado Ray Kaukonde, antiguo presidente de Mashonaland del este para el Zanu PF, quien es un exitoso hombre de negocios, así como para otros que se fueron con beunos portafolios de negocios y sus bolsillos llenos.
Fuente: Zimbawe Independent. / Por: Elias Mambo. / Traducción: Carolina Ruiz.
